El 60,3 % de los autónomos aún no se han adaptado al nuevo sistema de cotización, así lo recoge el último barómetro que elabora la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA)
Este cambio legislativo es percibido como una obligación más por los trabajadores por cuenta propia. ¿Y no lo es?
La complejidad de calcular tu facturación a primeros de año si eres autónomo
Cuando la realidad nos dice que muchos autónomos tienen unos ingresos que se asemejan (o no llegan) al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) es complejo calcular tu facturación y comprensible no querer cotizar 200 euros de más.
Adaptar la base de cotización hasta seis veces al año, es decir, contar con la posibilidad de elegir en qué tramo quieren pagar su cuota no termina de calar entre los autónomos.
En palabras de Lorenzo Amor, presidente de ATA: «aventurarse en el mes de febrero o marzo a prever que ingresos tiene un negocio a lo largo del curso es bastante complicado”.
“Aunque el año pasado no hubiésemos vivido en un contexto de guerra, tampoco lo habrían hecho. Bares, comercios o explotaciones agrarias no saben que van a facturar el mes siguiente, especialmente en este contexto de incertidumbre económica”.
La Tesorería General de la Seguridad Social hará el trabajo por los autónomos
Si un autónomo mantiene una actitud conservadora ante un cambio que le genera dudas , apostará por cotizar por la base más baja. Esto quiere decir que será la Seguridad Social la encargada de comprobar que la base calculada por el autónomo se corresponde con el rendimiento neto que haya obtenido cada año.
Una vez más, la solución pasa por la gestoría y sabemos que eso implica un gasto pero también un faro en mitad de un momento lleno de sombras (más gastos, menos ingresos)
Se trata es de que los nuevos autónomos, algunos hay, cuenten con la máxima información respecto al nuevo sistema de cotización.
Parece que el autónomo debe resignarse a pagar siempre, pero mientras que la medida para eliminar el IVA en las facturas para aquellos que ingresen menos de 85.000 euros al año sea una realidad, habrá que afrontar la que vivimos en 2023.
