Es posible que os hayáis despertados sobrecogidos por el sonido de un desgarrador lamento colectivo que se ha extendido a lo largo de todo el planeta. Un aterrador grito de furia contenida surgido de las profundidades cinéfilas de las redes sociales provocado por una afrenta casi apocalíptica: ‘Paddington 2’ ha arrebatado a ‘Ciudadano Kane’ el puesto de mejor película de la historia en Rotten Tomatoes.
Después de años situándose en la primera posición de la web, que recopila reseñas de series y largometrajes y las ordena según su índice de valoraciones “frescas” o “podridas”, el largometraje de Orson Welles ha pasado de tener una puntuación perfecta con 115 críticas positivas a quedar condenada al ostracismo por culpa de la número 116.
Justicia poética
El texto abominable que ha desatado el caos se ha añadido a Rotten Tomatoes 80 años después de su publicación original en el Chicago Tribune bajo el seudónimo de Mae Tinée, usado por aquél entonces por el colectivo de críticos cinematográficos de periódicos. En él, pueden leerse perlas como la siguiente:
“Habéis oído mucho sobre esta película, y veo en los anuncios que muchos expertos creen que es la mejor película de todos los tiempos. Yo no. Es interesante. Es diferente. De hecho, es lo suficientemente extraña para convertirse en una pieza de museo. Pero su sacrificio de la simplicidad a favor de la excentricidad la priva de toda distinción y valor como entretenimiento”.
El resultado de todo esta debacle, que podría derivarse en peligrosos disturbios frente a la sede del Chicago Tribune como a las gentes de Film Twitter les de por organizarse, es un pequeño milagro que ha hecho del mundo un lugar aún mejor: ‘Paddington 2’ se ha convertido automáticamente, por decreto de Rotten Tomatoes, en la mejor película de la historia gracias a un certificado con el 100% de frescura obtenido a través de 244 reseñas positivas —entre las que se incluye la de un servidor, todo sea dicho—.
Seamos sinceros. ¿A alguien le sorprende que una película protagonizada por un osito parlanchín adicto a los sandwiches de mermelada y con la voz de Ben Whishaw sea mejor que una titulada ‘Ciudadano Kane’ en la que ni siquiera sale un bastón? —Bueno, en realidad sí sale uno, pero la referencia a ‘Los Simpson’ estaba servida en bandeja—.