Estados Unidos, Rusia y Canadá impusieron este martes nuevas sanciones contra Rusia y algunos de sus aliados por la invasión a Ucrania, horas después de que el Kremlin respondiera con medidas punitorias contra la Casa Blanca.
El Reino Unido cortó las exportaciones a Rusia de artículos de lujo de alta gama e impuso nuevos aranceles contra cientos de productos clave.
También anunció sanciones contra otras 370 personas y entidades rusas y bielorrusas, entre los que se incluyen a aliados políticos clave del presidente ruso, Vladimir Putin, y voceros del Gobierno.
Además, cortó el apoyo financiero a la exportación a Rusia y Bielorrusia y anunció que dejará de emitir nuevas garantías, préstamos y seguros para las exportaciones a esos países.
En un comunicado, el Gobierno aseguró que estas sanciones disminuyen las perspectivas comerciales de ambos países al tiempo que reflejan aún más el impacto económico de la acción tomada por el Reino Unido y sus aliados.
El nuevo aumento de los derechos de importación representará una suba del 35% sobre las tasas actuales y alcanzará los 900 millones de libras esterlinas (más de 128.000 millones de pesos) en productos clave como el vodka, los metales, los fertilizantes y otros productos.
«Nuestros nuevos aranceles aislarán aún más a la economía rusa del comercio mundial, asegurando que no se beneficie del sistema internacional basado en reglas que no respeta», dijo en un comunicado el ministro de Finanzas, Rishi Sunak.
Mientras tanto, muchas empresas ya retiraron o suspendieron sus operaciones en Rusia, incluidos los fabricantes de automóviles británicos Jaguar, Land Rover y Aston Martin, y la marca de moda de lujo Burberry.
Las aerolíneas rusas y los aviones privados también están prohibidos en el espacio aéreo del Reino Unido.
Con el anuncio de este martes, ascienden a más de 1.000 las personas y entidades rusas sancionadas desde que comenzó la invasión de Ucrania el 24 de febrero.
Entre los aliados políticos de Putin ahora sancionados, se encuentran el primer ministro, Mijail Mishustin, el ministro de Defensa, Serguei Shoigu, y el ex presidente de Rusia, Dmitri Medvedev, así como los voceros Dmitry Peskov y Maria Zajarova, estos últimos señalados por presuntamente «desinformar».
Estados Unidos, por su parte, anunció sanciones contra el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, y su esposa, así como contra individuos y una entidad rusa, por corrupción y violaciones de los derechos humanos, informó el Tesoro.
Además, una jueza de Moscú, Natalia Mushnikova, fue sancionada en virtud de la llamada Ley Global Magnitsky, que tiene como objetivo luchar contra la corrupción y los abusos de los derechos humanos.
«Las designaciones de hoy demuestran que Estados Unidos seguirá imponiendo consecuencias concretas y significativas a quienes cometen actos de corrupción o están vinculados a graves abusos contra los derechos humanos», dijo la directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro (OFAC), Andrea Gacki, citada en el comunicado.
El Departamento de Estado de Estados Unidos también anunció hoy medidas punitivas contra 11 funcionarios del ministerio de Defensa ruso en respuesta a la invasión de Ucrania.
Al mismo tiempo, Canadá anunció una nueva ronda de sanciones contra 15 altos funcionarios y militares rusos, horas antes de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski se dirija al parlamento canadiense de forma virtual.
Entre los 15 sancionados se encuentran el vicepresidente del Gobierno ruso, Dmitri Grigorenko y el almirante a cargo de la flota del mar Negro, Igor Osipov.
El Gobierno considera que este castigo funcionará como presión para que Rusia «de marcha atrás» en su ofensiva contra Ucrania.
Las sanciones occidentales se conocen horas después de que Rusia aprobara sanciones personales contra el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; el secretario de Estado, Antony Blinken; así como contra otros altos funcionarios de ese país y de Canadá.
