Según
un
estudio
publicado
en
The
Lancet
Rheumatology,
en
el
año
2020
la
lumbalgia
afectó
a
alrededor
de
619
millones
de
personas
en
todo
el
mundo
y
se
estima
que
es
una
de
las
principales
causas
de
discapacidad.
Por
ello,
cuidar
nuestra
columna
con
buenos
hábitos
resulta
esencial
para
prevenir
no
sólo
lesiones
complejas,
sino
también
dolores
crónicos
a
causa
de
las
mismas.
En
este
sentido,
Marcelo
Arancibia,
kinesiólogo
y
entrenador
revela
en
su
cuenta
de
Instagram
cuáles
son
los
hábitos
que
dañan
la
columna.

Sedentarismo
Pasar
mucho
tiempo
sentados
es
uno
de
los
principales
factores
que
pueden
dañar
nuestra
columna,
especialmente
si
no
cambiamos
de
posición,
ya
que
la
presión
sobre
la
columna
y
los
discos
intervertebrales
es
mayor
y
pueden
aparecer
no
sólo
dolores
lumbares,
sino
también
a
nivel
cervical.
Por
eso,
se
recomienda
acortar
el
tiempo
sedentario
y
especialmente
cortar,
con
aunque
sea
un
par
de
minutos
de
movimiento,
el
tiempo
que
pasamos
sentados.
Tabaquismo
El
hábito
de
fumar
también
se
relaciona
con
una
mayor
incidencia
de
dolor
en
la
columna,
ya
que
afecta
la
vascularización
de
los
discos
intervertebrales
y
acelera
su
degeneración,
pudiendo
esto
ocasionar
diversas
patologías
a
nivel
de
la
columna.
Buscar
la
forma
de
dejar
el
hábito
de
fumar
es
clave
para
prevenir
todo
lo
que
el
tabaquismo
puede
ocasionar,
por
afectar
negativamente
la
circulación
sanguínea.
Sobreentrenamiento
Movernos
con
regularidad
resulta
clave
para
fortalecer
nuestra
columna
trabajando
al
mismo
tiempo
la
fuerza,
la
flexibilidad,
la
potencia,
y
la
estabilidad
de
nuestro
organismo.
Sin
embargo,
realizar
un
esfuerzo
mayor
al
que
el
cuerpo
puede
tolerar
también
puede
impactar
negativamente
en
nuestra
columna.
Por
eso,
encontrar
la
dosis
justa
y
no
sobreentrenar
es
clave
para
tener
una
columna
en
perfectas
condiciones,
fuerte
y
funcional,
que
nos
ayude
a
prevenir
lesiones
y
que
no
sea
causa
de
dolores
crónicos
o
de
discapacidad.
Estos
son
los
hábitos
que
pueden
dañar
nuestra
columna
según
Marcelo
Arancibia,
kinesiólogo
y
entrenador
físico.
Pero
además
de
evitar
los
hábitos
nombrados,
es
importante
siempre
tener
en
cuenta
que
antes
de
realizar
cualquier
entrenamiento
o
esfuerzo
físico
lo
mejor
es
conocer
nuestro
cuerpo
y
evaluar
mediante
chequeos
médicos
la
salud
de
nuestra
columna.
Referencias
-
Ferreira,
Manuela
L
et
al.
Global,
regional,
and
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burden
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Issue
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doi:
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PMID:
35079583;
PMCID:
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https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC8767074/ -
Matthew
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Ehsanian,
Elizabeth
Martin,
Ming-Chih
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All
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Volume
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Issue
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2020,
Pages
1759–1768,
https://doi.org/10.1093/pm/pnz224
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