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Padres y alumnos del IPET 412, la escuela técnica de Colonia Caroya, se autoconvocaron hoy para exigir las obras necesarias que habiliten el edificio.
Según las propias familias, aún restan trabajos de gas y energía para que se firme el final de obra, el colegio pueda ser habilitado para la mudanza completa y se inaugure cuando lo dispongan las autoridades.
Tras la difusión de la protesta, el Intendente Brandán se reunió ayer con un grupo de padres y les explicó de quién depende cada ítem que falta.
Aseguraron que lo que falta es de exclusiva responsabilidad del Ministerio de Educación de la Provincia y del Ministerio de Educación de la Nación.
Igualmente, la comunidad educativa quiso hacer visible el malestar por el tiempo que pasó desde que empezaron las clases hasta ahora, sin demasiados avances.
Además, plantearon una situación inédita: el edificio aún no está inaugurado y ya queda chico.
Es que tiene seis aulas y son Siete Años de estudio con sus respectivas divisiones (Primer Año, por ejemplo, tiene cuatro grupos).
En consecuencia, tendrán que dividir uno de los salones de usos múltiples para convertirlos en aulas que permitan albergar a los 500 chicos matriculados.