La
receta
de
hoy
es
un
excelente
aperitivo
que
podéis
tener
preparado
con
anterioridad
o
incluso
congelado
a
falta
únicamente
de
freír,
labor
que
hay
que
hacer
en
el
momento
para
que
estén
perfectos
y
crujientes.
Se
trata
de
los
tigres
o
mejillones
rellenos
con
bechamel
y
empanados,
un
delicioso
tentempié
con
el
que
podéis
obsequiar
a
los
vuestros
en
fiestas
o
cualquier
fin
de
semana.
No
sé
de
dónde
le
viene
el
nombre
a
este
plato,
incluso
hay
quien
los
llama
croquetas
de
mejillones,
y
existe
un
lugar
en
Madrid
que
los
hace
buenísimos
y
los
llama
Monterías
en
lugar
de
tigres,
pero
con
un
nombre
u
otro,
merece
la
pena
hacer
el
esfuerzo
de
prepararlos
para
darles
una
buena
alegría
a
los
nuestros
cuando
vayan
a
comérselos.
Es
una
receta
algo
más
laboriosa
que
otras
clásicas
como
los
mejillones
al
vapor
o
los
mejillones
la
marinera,
que
nunca
fallan,
pero
es
esfuerzo
merece
la
pena.
Comenzamos
cociendo
los
mejillones
una
vez
limpios
de
tierras
y
barbas,
poniéndolos
al
vapor
durante
unos
4
minutos
y
retirándolos
en
cuanto
se
abren.
Separamos
la
carne
de
las
conchas
y
nos
quedamos
con
la
mitad
de
ellas
que
limpiamos
a
conciencia.
Es
conveniente
darles
un
hervor
en
agua
con
vinagre
durante
unos
minutos.
Secar
y
reservar.
Picamos
una
cebolla
lo
más
pequeña
que
podamos
y
la
pochamos
en
una
sartén
con
3
cucharadas
de
aceite
de
oliva.
Una
vez
transparente,
añadimos
la
carne
del
mejillón
picada
en
trozos
de
tamaño
intermedio
y
salteamos
el
conjunto.
Incorporamos
el
tomate
frito,
las
gotas
de
tabasco
y
probamos,
rectificando
de
sal
si
fuera
necesario.
Hacemos
una
bechamel
utilizando
2
cucharadas
de
harina,
medio
litro
de
leche
entera
y
un
chorro
del
caldo
de
la
cocción
de
los
mejillones
bien
colado
para
que
el
conjunto
tenga
cierto
sabor
a
mar.
Reducimos
la
bechamel
removiendo
continuamente
hasta
que
quede
bastante
espesa
y
dejamos
enfriar.
Para
montar
los
tigres,
ponemos
en
cada
concha
una
cucharada
del
relleno
de
mejillones
con
tomate,
cubrimos
con
otra
cucharada
de
la
bechamel
espesa
y
cuando
estén
bien
fríos,
los
pasamos
por
huevo
batido
y
pan
rallado,
friéndolos
en
aceite
muy
caliente.
Como
siempre
conviene
escurrirlos
después
en
papel
absorbente.

Con
qué
acompañar
los
mejillones
tigres
o
mejillones
con
bechamel
empanados
Los
mejillones
tigres
o
mejillones
con
bechamel
empanados
son
un
excelente
aperitivo,
aunque
también
pueden
servir
como
entrante
a
una
comida
que
no
sea
muy
pesada.
Acompañados
de
un
picadillo
de
tomates
y
una
cerveza
bien
fresquita
son
un
perfecto
comienzo
de
un
fin
de
semana.
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