Entre los moluscos que solemos consumir y que se consideramos mariscos preciados para nuestra dieta, se encuentra el pulpo del cual te contamos sus propiedades, beneficios y cómo usarlo en la cocina.
Propiedades del pulpo
El pulpo como otros moluscos es un alimento rico en proteínas ante todo, ofreciendo además una pequeña cantidad de grasas entra las que destacan los ácidos grasos poliinsaturados u omega 3 como concluye una investigación publicada en 2008.
Es como otros mariscos fuente de yodo y sodio aunque este último mineral no se concentra en el pulpo en grandes proporciones. Aporta también hierro, calcio, potasio, magnesio y vitaminas del grupo B dentro de las cuales destaca su contenido en ácido fólico.
Se trata de un ingrediente reducido en colesterol y dentro de los muchos mariscos, el pulpo es uno de los pocos que no ofrece purinas al organismo.
Lamentablemente, como otros productos marinos, el pulpo puede tener metales pesados como mercurio o cadmio que en exceso colocan en riesgo la salud como señala un estudio publicado en Food and Chemical Toxicology. Sin embargo, el riesgo se reduce tras eliminar los órganos internos del pulpo y limpiar los tejidos del mismo como han observado científicos de Corea.
Beneficios del pulpo
El pulpo ofrece proteínas de calidad y grasas saludables para el organismo, siendo por ello un alimento de alta densidad nutritiva, reducido en hidratos y de baja concentranción calórica que podría saciarnos con facilidad y ser de utilidad al momento de perder peso.
Por otro lado, es fuente de variados minerales que el cuerpo necesita para funcionar adecuadamente y de vitaminas con efecto antioxidante como es la vitamina A.
Como señala un estudio publicado en la revista Reviews in Fisheries Science el consumo de pulpo como de otros productos marinos es sin duda de mucha ayuda para enriquecer la dieta y ampliar la disponibilidad de alimentos en un mundo donde el hambre y la malnutrición se hacen presentes.
Asimismo, el pulpo es una excelente opción para quienes tienen ácido úrico alto en sangre debido a su nulo aporte de purinas y también para quienes sufren de colesterol alto o dislipemias porque no es un producto animal rico en este lípido sino más bien con grasas de calidad que pueden reducir sus niveles en plasma.
Cómo usar pulpo en la cocina
El pulpo es un marisco que a diferencia de otros tiene una carne mucho más fibrosa y firme, por ello se aconseja consumir pulpos de 1 kilo o un 1,5 kilos que son los más tiernos.
Igualmente, podemos lograr que el pulpo fresco pierda firmeza congelándolo antes de cocinarlo o bien, «asustándolos», esto es introduciéndolo en agua a punto de ebullición y sacándolo unas cinco o seis veces antes de cocinarlo por completo como nos muestran en Directo al Paladar.
Siempre es importante limpiarlo bien bajo un chorro de agua previo a este procedimiento y también podemos emplear patas de pulpo ya cocidas y congeladas.
Con pulpo podemos elaborar desde un arroz cremoso o un pulpo a la gallega, hasta un pulpo a la parrilla con calabaza, ensalada con pulpo o ceviche con este marisco.
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