La
jardinería
puede
ser
un
mundo
fascinante,
pero
también
lleno
de
dudas.
Uno
de
los
enigmas
que
enfrentan
los
amantes
de
las
plantas
es
qué
hacer
con
la
tierra
vieja
de
las
macetas
y
si
esta
se
puede
reutilizar
sin
perjuicios
para
la
planta.
Uno
se
pregunta
si
debería
tirarla
y
cambiarla
completamente
o,
por
el
contrario,
si
es
posible
reutilizarla
para
seguir
cultivando
nuevas
plantas
sin
comprometer
su
salud.
Esta
es
una
de
las
preguntas
más
frecuentes
al
inicio
de
la
temporada
entre
quienes
buscan
darle
un
toque
verde
a
sus
hogares,
y
la
respuesta
no
es
tan
sencilla
como
parece.
La
tierra
en
nuestras
macetas,
aunque
aparentemente
está
en
buen
estado,
puede
haberse
agotado
de
nutrientes
con
el
paso
del
tiempo.
Sin
embargo,
la
reestructuración
de
esta
tierra
no
siempre
requiere
un
cambio
total.
De
hecho,
los
expertos
aseguran
que,
en
muchos
casos,
lo
único
que
necesita
es
un
poco
de
aireación
y
la
adición
de
algunos
elementos
nutritivos.
Esto
no
solo
ayudará
a
revitalizar
la
tierra,
sino
que
también
proporcionará
el
entorno
adecuado
para
el
crecimiento
saludable
de
las
plantas.
crear
un
huerto
urbano
Un
simple
aditivo
El
truco
está
en
no
complicarse
demasiado
con
el
proceso.
Para
renovarla,
basta
con
mezclarla
con
abono
o
compost,
lo
que
proporcionará
los
nutrientes
esenciales
que
han
desaparecido
con
el
uso
constante.
Y
si
las
macetas
han
tenido
varias
plantas
a
lo
largo
del
tiempo,
se
recomienda
usar
una
mezcla
especial
de
tierra
para
plantas,
que
contenga
una
base
rica
en
minerales.
Así,
las
plantas
no
solo
estarán
mejor
alimentadas,
sino
que
también
se
evita
la
acumulación
de
sales
que
pueden
dañarlas.
Es
importante
tener
en
cuenta
que
la
tierra
no
es
solo
un
medio
de
soporte
para
las
raíces;
también
juega
un
papel
crucial
en
la
absorción
de
agua.
Si
la
tierra
está
compactada
o
demasiado
densa,
las
raíces
no
podrán
penetrarla
adecuadamente,
lo
que
afectará
su
crecimiento.
Para
evitar
este
tipo
de
problemas,
es
recomendable
incorporar
materiales
que
ayuden
a
mejorar
el
drenaje,
como
perlita
o
arena.
Esta
combinación
favorecerá
un
entorno
saludable
para
las
raíces,
permitiendo
que
las
plantas
respiren
mejor.

Es
crucial
no
caer
en
la
tentación
de
usar
tierra
vieja
sin
haberla
revisado
previamente,
ya
que,
en
algunos
casos,
los
residuos
de
raíces
y
hongos
pueden
ser
contraproducentes
para
las
nuevas
plantas.
A
pesar
de
que
cambiar
la
tierra
puede
parecer
una
tarea
sencilla,
algunos
jardineros
experimentados
sugieren
realizarlo
solo
cada
cierto
tiempo,
ya
que
un
cambio
constante
podría
alterar
el
equilibrio
de
nutrientes.
Si
bien
es
cierto
que
la
tierra
tiende
a
perder
propiedades
con
el
uso,
no
siempre
es
necesario
reemplazarla
por
completo.
En
muchas
ocasiones,
basta
con
mejorar
la
calidad
del
suelo
mediante
un
poco
de
mantenimiento
adecuado.
Otras
alternativas
Para
aquellos
que
no
tienen
el
tiempo
o
la
paciencia
de
hacerlo
todo
por
sí
mismos,
existen
alternativas
más
rápidas
y
prácticas.
Algunas
marcas
ofrecen
tierras
especiales
que
ya
vienen
enriquecidas
con
fertilizantes,
lo
que
facilita
el
proceso.
Los
expertos
coinciden
en
que,
cuando
se
trata
de
plantas
en
interiores,
el
cuidado
de
la
tierra
es
aún
más
importante.
En
estos
casos,
el
riego
debe
ser
especialmente
controlado
para
evitar
que
la
tierra
se
sature
de
agua
y
comience
a
descomponerse.
Además,
las
plantas
de
interior
suelen
ser
más
susceptibles
a
enfermedades
fúngicas,
por
lo
que
asegurarse
de
que
el
sustrato
esté
bien
aireado
es
fundamental
para
mantenerlas
libres
de
problemas.
En
realidad,
mantener
un
equilibrio
adecuado
entre
fertilización,
aireación
y
drenaje
será
siempre
la
fórmula
para
un
jardín
feliz.
Reutilizar
la
tierra
no
solo
es
una
opción
ecológica,
sino
también
una
forma
de
aprovechar
al
máximo
los
recursos
que
existen
a
nuestra
disposición,
sin
renunciar
a
la
calidad.
Foto
|
Thirdman
y
Anna
Shvets
En
DAP
|
Así
puedes
cultivar
un
limonero
para
obtener
cítricos
todo
el
año