Increíble, pero pasó: el día que el IndyCar aceleró en el Óvalo de Rafaela

Esta
semana,
en
el
mundo
del
automovilismo
argentino,
hubo
dos
temas
en
agenda:

la
continuidad
de
Agustín
Canapino
en
el
IndyCar
y

la
carrera
del
TC
en
el
Óvalo
de
Rafaela,
que
entregará
un
premio
récord
de
ocho
millones
de
pesos.
Dos
tópicos
que
parecen
completamente
distantes,
pero
que
alguna
vez
se
cruzaron
y
nada
tuvo
que
ver
con
el
Titán
o
el
Turismo
Carretera.

Se
trata
de
la
categoría
yanqui
y
el
circuito
santafesino,
con
una
historia
en
común
hace
más
de
cinco
décadas.

Fue
en
febrero
de
1971,
cuando
el

Campeonato
Nacional
de
USAC
(como
se
conocía
al
certamen
por
ese
entonces,
luego
renombrado
CART,
disputado
con
la
Indy
Racing
League
y
unificado
como
la
IndyCar
Series)
visitó
el
autódromo
para
darle
inicio
al
campeonato
de
ese
año.
El
evento
fue
llamado

Rafaela
300
Indy.

Se
realizaron
dos
series,
ambas
ganadas
por
el
campeón
Al
Unser,
en
las
que
hubo
participación
albiceleste:

Carlos
Pairetti
hizo
su
aparición
en
el
Óvalo
y
metió
un
12°
y
un
9°
puesto
-fue
9°
en
la
general-
arriba
de
un
Vollstedt
Ford
Turbo.

Esa
fue
la
primera
y
última
vez
en
la
que
la
máxima
categoría
de
monoplazas
yanqui
corrió
en
la
Argentina,
una
racha
que
trató
de
cortarse
en
los
últimos
años
y
que
aún
no
se
logró…

Al
haber
un
equipo
comandado
por
un
argentino,
como
lo
es
el

Juncos
Hollinger
Racing
de
Ricardo
Juncos,
y
un
piloto
nacional
como
Agustín
Canapino,

que
fue
confirmado
para
completar
esta
temporada
y
sueña
con
continuar
en
la
siguiente,
surgió
la
idea
de
que
el
IndyCar
vuelva
al
país.

Mark
Miles,
presidente
de
Penske
Entertainment,
hizo
referencia
a
un
posible
retorno
y
lo
vio
improbable
para
el
2024: «Los
observadores
han
notado
que

es
difícil
hacer
negocios
en
este
momento
en
Argentina,
por
lo
que
no
lo
veo
como
una
opción
viable
para
este
año.
Ricardo
Juncos
ha
sido
nuestro
firme
defensor
y
posible
promotor
si
pudiéramos
hacer
un
evento
en
Argentina.

Es
una
conversación
en
curso,
pero
no
creo
que
sea
factible
en
el
2024«.
De
momento,
tocará
acompañar
al
Titán
por
televisión.

Después
de
haberlo
respaldado
y
mantenido
en
el
puesto
por
el
resto
de
la
temporada,
Ricardo
Juncos
hizo
referencia
a
la
continuidad
de
Canapa
más
allá
del
2024. «Es
una
cuestión
económica.
Teníamos
el
presupuesto
estipulado
para
2024
y
el
del
año
2025
aún
no
lo
tenemos,
recién
ahí
sabremos
las
cartas
que
tenemos
para
jugar.
Agustín,
como
cualquier
piloto
debutante,

se
merece
la
continuidad
pero
esto
no
depende
de
mí
sino
de
la
situación.

El
costo
de
un
campeonato
hay
que
solventarlo«,
explicó
el
líder
de
la
estructura
en
diálogo
con
Campeones».

En
cuanto
a
los
resultados,
y
si
podrían
ser
un
factor
que
defina
la
continuidad
del
Titán,
Juncos
comentó: «En
eso
no
hay
que
poner
presión,
porque
en
el
promedio
estamos
siendo
el
segundo
mejor
equipo
Chevrolet.

Sería
un
error
que
un
podio
o
un
quinto
puesto
haga
la
diferencia«.