Después de la semana de haber conquistado la semana de la moda de París y Madrid, Palomo Spain ha sido el encargado de dar el banderazo de salida en una edición más de la Fashion Week de la gran manzana, a la que ha llevado la cultura flamenca a través de una formidable colección que, como otras, deja ver una espectacular influencia femenina en donde retoma los lunares, los tonos brillantes y la sastrería como nunca antes.
De nuevo, como un habitual viaje en el tiempo a la España del siglo XX, el diseñador Alejandro Gómez Palomo nos trae inspiración del Ballets Russes, una compañía de ballet ruso que se afincó en España durante la primera guerra mundial, de ahí el porqué veamos esta colección con una teatralidad digna de estudiarse.
Flagrante en color y en sus texturas, vemos cómo los estampados de lunares se apropian de sus propuestas más coloridas y aún extravagantes para muchos, sin embargo, en la pasarela su colección evolucionó a una refinada visión del tailoring convencional.
Con tonalidades grises y cortes de volumen justo y perfectamente trabajado, hace de los trajes y de las chaquetas todo una oda arquitectónica al arte sartorial probando que su marca va en el camino correcto de convertirse no sólo en la preferida de un sector específico, sino también en un éxito comercial que llame la atención y las miradas de los más escépticos.
En instantes bohemia, en ocasiones flamenca pero elegante en toda regla, la colección de invierno 2019 de Palomo Spain toma también referencia de los trajes de luces de los toreros al apostar por el tiro alto de los pantalones, la exquisitez de materiales como el terciopelo y la delicadeza de las transparencias.
En una incursión acercada a los diseños más convencionales, Palomo Spain inauguró la semana de la moda de Nueva York por todo lo alto.
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