Atlanta igualó este lunes sin goles ante Deportivo Maipú y si bien el resultado fue discreto se mantiene como líder de su zona, al menos hasta que juegue Tigre. El Bohemio no encontró caminos para generar peligro y prácticamente no tuvo situaciones de gol.
En condición de local, y enfrentándose extremos de la tabla, la obligación era toda de los de Walter Erviti. Algo que también entendía la visita, que se replegaba en su campo y no parecía tener demasiado interés en verle la cara a Rago. La posesión comenzó siendo de Atlanta y lo fue durante toda la primera etapa, pero en ningún momento logró sacarle provecho a ese dominio.
Las transiciones lentas, los laterales con poca proyección, la falta de rebeldía en los extremos y un Colombini que recibió siempre de espaldas al arco rival y con marca encima fueron las razones que limitaron mucho la creación del Bohemio. Todo esto propiciado por un Maipú que, con mucha disciplina, se aferraba a su libreto que le daba buenos resultados.
Tras una primera etapa muy floja, el Bohemio se adelantó unos metros más y buscó abrir el juego con el ingreso de Solari por Pedrozo. Sin embargo, más allá de un arrebato en el inicio, sufrió más de lo que ganó en el complemento. Maipú vio que no era tan imposible llegarle a Rago y lo hizo trabajar por primera vez en el partido. Contrariamente a lo que pretendía el entrenador, Atlanta terminó poniendo más empeño en defenderse que en inquietar arriba.
Para colmo, del mediocampo a la delantera, la pelota no fluía. Erviti mandó a Taborda a jugar de enganche, pero sin resultados, lo reemplazó por Riquelme. Y a falta de 20, arriesgó con la entrada de Perales por Fernández y García por Ramírez. Así, formaba un 3-4-3 que tampoco consiguió el resultado deseado.
Las cosas se le complicaron a 10 del cierre, cuando Martín López vio la segunda amarilla y se fue correctamente expulsado. No obstante, sobre el final, alejándose de las formas y apelando al espíritu, Atlanta llegó desprolijamente a poner la pelota en campo rival y a intentar discutir un 0-0 que ya estaba grabado a fuego. No alcanzó y el resultado no se movió.
El punto sirve en varios aspectos, pero la sensación es negativa más por el cómo que por el resultado en sí. A Atlanta le faltó creación, velocidad, agresividad y una cuota de rebeldía que lo venían caracterizando. En estas 10 fechas, no fue nunca un equipo de generar mucho, pero sí de convertir lo poco que hilvanaba. En esta ocasión, preocupantemente, no provocó una sola situación de riesgo.
Posiciones
Zona A: Atlanta, 22 puntos; Gimnasia (M), 21; Tigre, 19; San Martín (T), Riestra y Almirante Brown, 13; Mitre (SdE), 12; Quilmes, Agropecuario, Belgrano y Chacarita, 11; Deportivo Maipú, Estudiantes (RC), Estudiantes (RC), Alvarado, Estudiantes (BA) y Temperley, 10; y Nueva Chicago, 6.
Zona B: Güemes (SdE), 21; Independiente Rivadavia, 19; All Boys, 16; Santamarina y Brown (A), 15; Atlético Rafaela, Gimnasia (J), San Telmo y Ferro, 14; Defensores de Belgrano y Barracas Central, 13; San Martín (SJ) y Deportivo Morón, 12; Instituto y Almagro, 10; Brown (PM) y Tristán Suárez, 8; y Villa Dálmine, 6.
Con información de Solo Ascenso.