«Tiene su ADN. Puede que incluso tenga su sudor», dijo la copropietaria de Excalibur Auctions, la compañía londinense que subastó esta pieza haciendo referencia a Harrison Ford. Al parecer, el actor alquiló dos plantas en una casa en Notting Hill en el verano de 1976. Los dueños del edificio vivían en las plantas bajas, y afirman que Ford dejó olvidado el guión de ‘Star Wars’ cuando se fue de la casa.
Pero para el coleccionista de objetos de ‘Star Wars‘, este guion tiene aún más interés que el meramente genético. Por eso se ha cotizado a nada menos que 13.600 dólares. Se trata del cuarto borrador del episodio cuatro de la saga (primera de la franquicia en rodarse, a finales de los setenta), cuando posiblemente aún nadie de los implicados sabía que estaba dentro de un futuro fenómeno de masas que cambiaría la industria del cine.
El guion tiene fecha, 15 de marzo dee 1976, y un título muy distinto al que luego conoceríamos: ‘ The Adventures of Luke Starkiller’, cuando el proyecto aún era un delirio pulp de George Lucas con el que quería rendir homenaje a los héroes de los seriales de ciencia ficción del pasado, como Flash Gordon o Buck Rogers. Por suerte, muchos de esos elementos quedaron en el estilo final de la película de Lucas.
El guion subastado ni siquiera está en el mejor estado posible: tan solo contiene las páginas 1 a 48, 55, 56, 58 a 88, una docena de páginas de revisiones y otra veintena de páginas de color rosa que podrían ser correcciones aún posteriores. En esta versión del guión Chewbacca es presentado en la cantina, y los cambios que se hicieron en él fueron definitivos, ya que el guión de ‘Star Wars’ que acabaó rodándose estaba en su quinta versión.
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