Cada
verano
se
vuelve
a
poner
de
moda
en
las
redes
sociales
ese
ya
manido
“desconectar
para
volver
a
conectar”.
Algo
que
no
es
otra
cosa
que
una
desintoxicación
de
dopamina
y
que
algunos
usuarios
están
tomando
casi
como
una
especie
de
reto
viral
en
TikTok.
Aunque
el
ayuno
de
dopamina
no
tiene
base
científica
como
tal,
sí
que
puede
tener
bastante
sentido
una
vez
que
entendemos
cómo
reacciona
nuestro
cerebro
a
ciertos
estímulos
que
nos
llegan
directamente
desde
el
móvil.
Abstinencia
temporal
del
móvil…
y
del
azúcar
Tal
vez
la
historia
del
perro
de
Pavlov
te
suene:
ante
un
estímulo,
positivo
o
negativo,
estos
animales
reaccionaban
exactamente
como
se
esperaba.
Algo
similar
nos
ocurre
con
el
móvil.
Vemos
una
notificación
y
somos
casi
incapaces
de
no
leerla.
También,
cuando
vemos
una
avalancha
de
‘likes’
en
Instagram
o
estrenan
un
nuevo
capítulo
de
nuestra
serie
favorita
en
Netflix,
nuestro
cerebro
reacciona
segregando
dopamina
de
una
manera
artificial.
El
problema
llega
cuando
la
liberamos
de
una
forma
casi
constante.
Si
abusamos
de
ella,
podemos
generar
una
adicción
a
eso
que
nos
produce
esa
reacción,
además
de
otros
problemas
relacionados.
Por
eso,
el
movimiento
#DopamineDetox
propone
desconectar
del
móvil
durante
al
menos
24
horas
para
eliminar
esos
estímulos
digitales.
En
realidad,
no
se
trata
de
hacer
un
ayuno
de
dopamina
como
tal,
si
no
de
encontrarla
en
otras
fuentes.
Mejorar
la
concentración,
centrarse
en
el
aquí
y
el
ahora,
reducir
la
ansiedad
o
ganar
esas
horas
de
vida
que
a
veces
perdemos
simplemente
‘scrolleando’
sin
fin.

No
existe
una
única
regla
para
llevar
a
cabo
este
“reto”.
Hay
usuarios
que
simplemente
se
quitan
las
notificaciones
durante
24
horas,
otros
que
convierten
su
smartphone
en
un
móvil
tonto
o
incluso
quienes
solo
se
desinstalan
temporalmente
las
redes
sociales,
WhatsApp
y
Netflix.
Los
más
extremistas,
eliminan
también
el
consumo
de
ultraprocesados,
azúcar
o
incluso
música
para
que
el
cerebro
tenga
menos
fuentes
externas
de
las
que
tirar.
Es
decir,
todo
lo
que
ofrezca
una
gratificación
rápida.
En
su
lugar,
se
propone
salir
a
caminar,
leer,
consumir
alimentos
saludables
y
cuidar
la
higiene
del
sueño.
En
solo
dos
semanas,
una
desintoxicación
del
móvil
tiene
efectos
muy
positivos
sobre
la
salud
mental
del
usuario,
su
capacidad
de
atención
y
su
estado
de
ánimo
y
bienestar.
En
la
época
de
la
gratificació
instantánea,
el
hecho
de
que
necesitemos
un
“ayuno
de
dopamina”
tal
vez
no
sea
tanto
una
solución,
sino
un
síntoma,
una
necesidad
real
de
frenar
esa
hiperestimulación
a
la
que
estamos
expuestos
a
cada
minuto.
Más
allá
de
limitar
el
uso
del
móvil
durante
24
horas
o
incluso
una
semana,
la
mejor
solución
es
aprender
a
relacionarnos
con
él
de
una
manera
saludable.
El
móvil
no
es
el
enemigo,
a
pesar
de
la
mala
fama
que
lo
acompaña.
Al
final,
todo
consiste
en
encontrar
un
equilibrio.
En
Xataka
Android
|
Desbloqueaba
mi
móvil
decenas
de
veces
al
día
y
no
sabía
para
qué.
Esta
aplicación
me
pregunta
justo
lo
mismo
En
Xataka
Android
|
Llevo
una
semana
usando
mi
Android
como
el
móvil
soviético
de
Broncano.
Me
ha
ido
tan
bien
que
creo
que
no
hay
vuelta
atrás







































