Comenzaremos cortando el solomillo en dos piezas del mismo tamaño para que nos quepa en la olla. Picaremos las cebolletas en tiras finas y escurrimos el agua de las zanahorias baby o picaremos las comunes en rodajas.
En un cacito echamos el azúcar y una cucharadita de agua, calentamos hasta que se forme un caramelo rubio, separamos del fuego y con mucho cuidado le añadimos tres cucharadas de agua más hasta formar una salsa de caramelo, que mantendremos en un lugar caliente para que no se enfríe.
En una cazuela de fondo grueso calentamos el aceite y sofreímos la carne hasta que esté dorada, añadimos la cebolleta picada y las zanahorias y cocinamos durante dos minutos. Añadimos el vinagre, raspamos el fondo de la cacerola con una espátula y dejamos que se evapore.
Espolvoreamos la carne con las cinco especias, añadimos el caramelo, volteando el solomillo varias veces para que se impregne bien de la mezcla. Salamos, añadimos la salsa de soja y cocinamos media hora a fuego lento con la cazuela tapada, removiendo de vez en cuando para que no se pegue.
