Lavar bien las patatas. Cortar las partes externas con ayuda de un buen cuchillo de tal modo que queden con forma de prisma, rectangular, con los lados rectos. Con cuidado, o usando una mandolina, cortar cada patata en finas láminas rectangulares de no más de medio centímetro. Poner a remojo en un cuenco con agua fría unos 30 minutos.
Precalentar el horno a 190ºC y engrasar una fuente pequeña. Escurrir las patatas, enjuagar y secar bien con papel de cocina o un paño. Formar tacos de patata superponiendo las distintas láminas. Colocarlas en la fuente y separarlas ligeramente para dejarlas escalonadas, como si fueran fichas de dominó o una baraja de cartas.
Repartir el aceite de oliva por encima y sazonar con las especias. Hornear durante unos 30-40 minutos, hasta que se hayan dorado bien, vigilando que no se quemen. Salpimentar un poco más al gusto antes de servir.