Imputaron a los dueños del geriátrico clausurado

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A principios de abril, clausuraron el geriátrico “La Tercera Edad” de la ciudad de San Francisco, el mismo fue denunciado por funcionar ilegalmente y por abandono de personas. En este marco, la Fiscalía de 1° Turno, a cargo del Dr. Oscar Gieco, imputó a los dueños de las instalaciones, los cuales son Jesús Martínez y Daniela Mercado, porque se les atribuye ser autores del delito de abandono de personas.

Está imputación se debe a que se recibieron los informes de los médicos forenses, los cual indicaban que algunos adultos mayores sufrían desnutrición y estaban descuidados. Además, se manifestó que los abuelos no contaban con atención médica en el lugar, algo que va en contra de las normas de este tipo de establecimientos.

Por otra parte, cabe remarcar que en el lugar había entre 10 y 12 abuelos. A su vez, muchos familiares de los antiguos residentes habían denunciado está situación y apuntaron que tampoco podían ver a los adultos mayores.

El abandono de personas está tipificado en el código Penal de la Nación y prevé una pena que va desde los 2 años a 6 años de prisión y en el caso que resultarán graves daños en la salud, la misma se acrece comenzando de los 3 años a los 10 años para los autores.

Los encargados del geriátrico fueron notificados de la imputación en la mañana de este jueves y designaron como abogado defensor al Asesor letrado en turno. Se prevé que durante el transcurso de la semana que viene se les tome declaración indagatoria ante el fiscal que instruye la causa.

El Articulo 106

Art. 106: “El que pusiere en peligro la vida o la salud de otro, sea colocándolo en situación de desamparo, sea abandonado a su suerte a una persona incapaz de valerse y a la que deba mantener o cuidar o a la que el mismo autor haya incapacitado, será reprimido con prisión de dos (2) a seis (6) años.

La pena será de reclusión o prisión de tres (3) a diez (10) años, si a consecuencia del abandono resultare un grave daño en el cuerpo o en la salud de la víctima.

Si ocurriere la muerte, la pena será de cinco (5) a quince (15) años de reclusión o prisión.”

Clausuraron el geriátrico “La Tercera Edad”

“Hicimos el esfuerzo de salvar a los abuelos y lo logramos”