Hace
unos
meses
que
Google
decidió
decir
adiós
al
Chromecast
en
un
movimiento
inexplicable:
la
llegada
del
Google
TV
Streamer
es
una
buena
noticia
para
quienes
hacen
uso
más
exigente,
pero
a
cambio
el
usuario
medio
quedaba
huérfano
del
dispositivo
bueno,
bonito
y
barato
para
vitaminar
la
tele.
Con
este
adiós,
Google
dejaba
un
hueco
en
su
segmento
que
solo
el
TV
box
de
Xiaomi
es
capaz
de
llenar.
Y
ni
aún
así:
en
mi
opinión
Google
se
ha
cargado
el
mejor
dispositivo
(hardware)
que
ha
lanzado
en
toda
la
historia
de
la
compañía
y
a
los
hechos
me
remito:
estará
muerto
para
la
gran
G,
pero
sigue
vivo
y
gozando
de
buena
salud
en
muchos
hogares
con
todo
el
sentido
del
mundo.
No
es
para
menos:
el
Google
Chromecast
no
tiene
competencia.
Una
experiencia
verdaderamente
intuitiva
y
cumplidora
Conectar,
configuración
mínima
y
a
funcionar.
Para
gente
a
la
que
nos
gusta
la
tecnología
el
proceso
de
preparar
un
dispositivo
para
su
uso
resulta
entretenida,
pero
para
otras
personas
supone
un
gran
dolor
de
cabeza.
Aquí
no
había
misterio:
con
conectarse
al
Wi-Fi
doméstico
y
añadir
tu
cuenta
de
Google
ya
está
listo
para
funcionar.
Y
esto
es
solo
el
principio.
La
interfaz
está
cuidada
al
milímetro
para
resultar
simple
y
agradable
y
aunque
esto
es
extensivo
a
otros
set
top
box
que
albergan
el
mismo
SO
(en
realidad
son
pocos),
esta
sensación
de
sencillez
también
la
sientes
cuando
tocas
el
dispositivo.
El
diseño
es
sencillamente
sobresaliente
y
único:
está
ideado
para
que
cualquiera
pueda
usarlo,
con
un
mando
compacto
y
de
calidad
con
los
botones
justos
y
necesarios
(otros
set
top
box
tienen
un
diseño
mucho
más
tosco
y
enrevesado).
Google
hace
el
dispositivo
y
el
sistema
operativo
y
eso
se
nota.

Todas
las
ventajas
de
Google
TV
y
Google
Como
mencionaba
en
el
punto
anterior,
que
un
set
top
box
para
la
tele
tenga
Google
TV
ya
es
un
plus:
es
el
mejor
y
más
completo
sistema
operativo
para
Smart
TV
en
cuanto
a
personalización,
opciones,
interfaz
y
cantidad
de
aplicaciones.
Esto
reduce
considerablemente
las
opciones,
pero
que
sea
de
Google
es
otro
as
en
la
manga:
Google
TV
está
bien,
pero
hacen
falta
parches
y
actualizaciones
y
aquí
la
empresa
de
Mountain
View
no
tiene
rival.
Google
gana
por
goleada
dentro
del
ecosistema
Android
en
cuanto
a
updates
de
software
para
seguir
depurando
la
experiencia,
añadir
funciones
y
solucionar
bugs.
Lo
mismo
que
Google
hace
con
sus
Pixel,
pero
en
el
terreno
de
los
dispositivos
para
Smart
TV.
Puede
que
otros
tengan
mejor
ficha
técnica,
pero
con
el
paso
del
tiempo
esa
ausencia
o
menor
frecuencia
de
actualizaciones
pesan.
Vale
mucho
para
lo
que
cuesta
Hay
dos
hechos
innegables:
la
tele
nos
dura
mucho
más
que
el
móvil
y
poca
gente
se
gasta
más
de
mil
euros
en
un
Smart
TV.
Con
esto
en
mente,
pensar
en
que
alguien
vaya
a
gastarse
los
119
euros
de
su
sucesor
para
actualizar
un
televisor
de
hace
siete
años
que
le
costó
500
euros
suena
poco
probable.
El
Google
TV
Streamer
es
un
producto
de
nicho.
Y
más
si
no
le
vas
a
sacar
partido
a
extras
como
Matter
o
al
puerto
Ethernet,
que
resulta
muy
interesante
para
usuarios
techies
pero
no
tanto
para
esa
gente
que
simplemente
quiere
ver
Netflix
y
Max
y
ya.
En
ese
escenario
se
busca
un
dispositivo
barato
y
funcional
y
teniendo
en
cuenta
los
PVP
de
39,99
euros
y
69,99
euros
de
los
Chromecast
y
sus
ofertas
frecuentes,
la
realidad
es
que
no
tiene
rival:
Google
dio
con
la
tecla
en
cuanto
a
rango
de
precios.
Sí,
hay
set
top
box
de
marcas
poco
conocidas
que
rondan
los
50
euros,
pero
la
experiencia
está
a
años
luz
tanto
por
dentro
como
por
fuera.
En
Xataka
Android
|
El
Chromecast
sirve
para
mucho
más
de
lo
que
parece:
siete
usos
poco
comunes
Portada
|
Enrique
Pérez
para
Xataka