Hay
choques
culturales
discretos
y
luego
están
los
gastronómicos,
que
a
veces,
llegan
a
la
mesa
con
ojos,
antenas
y
una
mirada
inquietante
desde
el
plato.
En
TikTok,
una
turista
extranjera
muestra
su
cara
de
asombro
cuando
le
sirven
gambas
con
cabeza.
La
escena
es
tan
absurda
como
entrañable.
Por
su
cara,
la
chica
no
sabe
si
empezar
por
la
cola
o
huir
del
restaurante,
y
su
comentario
termina
de
rematar
ese
choque
cultural: «Pides
gambas
en
Europa»
y
emoticonos
de
llorera
máxima.
Gracias
a
que
estamos
todos
muy
viajados,
ya
sabemos
que
en
muchos
países
los
mariscos
se
sirven
limpios
y
sin
señales
de
que
alguna
vez
tuvieron
vida:
todo
lo
contrario
al
estilo
mediterráneo
tradicional.
Una
cola,
unos
ojos
y
una
sabrosa
cabeza
suman,
no
restan.
La
cara
de
esta
joven
lo
dice
todo,
también
el
pie
de
foto: «¿Por
qué
la
cabeza?».
El
vídeo
se
ha
hecho
viral
porque
toca
un
punto
sensible:
la
forma
en
que
diferentes
culturas
lidian
con
lo
crudo
y
lo
real
en
la
comida.
cocinar
de
forma
segura
Todo
un
manjar
Mientras
en
España
se
chupan
cabezas
como
un
manjar
codiciado,
en
otras
latitudes
lo
ven
como
algo
grotesco,
casi
una
falta
de
respeto
digestivo.
Nada
más
cerca
del
infierno
que
eso.
Más
allá
de
la
comedia,
la
escena
deja
ver
cómo
el
turismo
gastronómico
también
es
un
acto
de
inmersión
en
lo
desconocido
auténtico.
No
hay
manual
para
prepararse
ante
una
cabeza
de
gamba.
Solo
queda
observar,
probar
o,
como
esta
turista,
documentarlo
todo
con
humor
involuntario.
 «Incluso
peladas»
Las
reacciones
han
sido
en
su
mayoría
de
incomprensión,
de
gente
que
se
pregunta
cuál
es
el
problema,
con
españoles
explicando
que
 «ahí
está
lo
mejor»
y
otros
turistas
defendiendo
que
en
Estados
Unidos
los
chefs «las
sirven
incluso
peladas».
 «Madre
mía,
esto
me
pasó
hace
años
en
España.
Pedimos
una
barbacoa
de
gambas
en
un
bar
de
playa.
Cuando
vi
el
plato
pensé
que
las
gambas
llevaban
pasas.
¡No
me
lo
creía!
Mi
amigo
incluso
se
comió
los
ojos
y
todo.
Yo
me
comí
una
hamburgesa»,
asegura
un
usuario.
En
tiempos
de
globalización,
estas
escenas
nos
recuerdan
que
la
comida
aún
puede
sorprender,
horrorizar
o
unir
a
través
de
lo
inesperado.
Algunos
explican
que
en
América
lo
habitual
es
servirlas
sin
ojos
y
que
para
que
se
sirvan
enteras
hay
que
especificarlo
en
la
comanda.
Foto
|
Elle
Hughes
En
DAP
|
Los
alemanes
han
descubierto
el
tinto
de
verano
y
aseguran
que
es
el
nuevo
Aperol
Spritz
 
            












































