«Manuelita», un bello relato sobre la adolescencia, el amor y las disidencias que llegó desde la Ciudad de Buenos Aires; «Guerra contra el olvido», que vino de Formosa y propone el cruce en la escena de los cuerpos, el movimiento y la palabra para narrar a las mujeres partícipes de la Guerra de Malvinas y la propuesta pampeana de «Lápices, un musical con memoria», que evoca el destino trágico de los jóvenes de La Plata secuestrados, torturados y desparecidos durante la última dictadura militar, son las obras que se pudieron ver el sábado último en Catamarca en la 37ª edición de la Fiesta Nacional del Teatro.
Al mismo tiempo, el sábado último fue un día de debate al interior del Instituto Nacional del Teatro (INT) en torno de la mesa «25 años de la Ley de Teatro: conversatorio con exsecretaries generales del INT», que sirvió para analizar la trayectoria y los desafíos enfrentados por el organismo en el proceso de construcción desde su fundación.
A modo de repaso y análisis, en la mesa se escucharon diferentes posturas para marcar el sentido profundo del organismo gobernando en forma democrática y federal, según establece su acta constitutiva, el modo como vino a modificar el mapa teatral nacional desde su funcionamiento, fragilidades y desafíos a futuro y de cara a la coyuntura actual.
En la mañana de este domingo continuaba el funcionamiento de las charlas y debates suscitados en La Minga, un espacio de encuentro que tiene lugar en uno de los patios de la bella y antigua Casa de la Cultura de Catamarca, entre los elencos y compañías que presentaron sus obras el día anterior, juradas del INT, periodistas y público, para hablar sobre aquello suscitado por los espectáculos como modo de repensar la propia dinámica de la escena y lo que se pone en juego en la Fiesta a través de las obras que llegan.
«Manuelita», uno de los tres trabajos teatrales de CABA que llegaron a este encuentro, es una historia de iniciación y adolescencia sobre el despertar sexual, los deseos, el modo obturador como los mandatos actúan sobre las identidades de las personas, sus disidencias y el modo de descubrirlas, aceptarlas y transitarlas.
Con texto y dirección de Alejo Suleiro y protagónicos a cargo de Tiago Mousseaudy Tomás Corradi Bracco, «Manuelita» arranca con un relato sobre la masturbación adolescente, los mandatos de la masculinidad y el fútbol para de a poco ir narrando la historia de dos amigos, su atracción amorosa y su vínculo, que finaliza en un expresivo y logrado cuadro final de baile que tuvo una excelente recepción en la sala Urbano Giraldi de la capital de Catamarca.
Más temprano, en el Teatro del Sur, se había visto la puesta de «Guerra contra el olvido», protagonizada por cuatro jóvenes y que con inusitada belleza, logra poblar el espacio escénico con una propuesta que funde la coreografía corporal, el relato y un delicado trabajo de iluminación para rescatar las voces de mujeres vinculadas con la Guerra de Malvinas, espacio largamente silenciado en la historia oral y escrita.
Silvia Gabazza, Silvana Guanes, Rocío Ruiz y Carolina Sosa, dirigidas por Marcela del Turco, logran un delicado mecanismo que piensa el movimiento hasta el mínimo detalle y que en construcción con cuerpos que escapan de la normatividad, iluminación y objetos, construyen un espacio íntimo, de inabarcable belleza y profundas resonancias y que, solo de a momentos, tiene el defecto de repetir enunciativamente lo que ya fue narrado por medios más conmovedores y sugestivos. Una cierta obligación sobre lo explícito que en algunos momentos le restar fuerza dramática al relato.
El sábado último, por la tarde, en una jornada donde el termómetro alcanzó los 39 grados en la ciudad y sus alrededores, en el gran Cine Teatro Catamarca se vio «Lápices, un musical con memoria», con un voluminoso y completo elenco, con libro, puesta y coreografías originales de Sol Cardozo y Paula Grosse, que se sitúa en 1976 y en la lucha por el boleto estudiantil de alumnos de secundaria de la ciudad de La Plata, para relatar una historia de amor, sueños y rock en épocas de terror, represión y secuestros, pensada especialmente para el público adolescente.
Este domingo se verán en Catamarca la comedia jujeña «La Compañía americana de danza en gira a China»; «Fuera de este mundo», un drama que es uno de los trabajos seleccionados de Mendoza y «Nadie nunca murió de amor excepto alguien alguna vez», que llega desde Salta.
Mientras que en La Rioja, donde también se realiza la Fiesta Nacional del Teatro, será el turno de «Cuando el viento ruge», de CABA; «¿Y su oficio?» trabajo de clown correntino; «Reflexiones caninas. Dudar no está mal», espectáculo de murga uruguaya que llega desde Tucumán; y «Siete perros», de Neuquén.
