Al sur de México un grupo de arqueólogos ha dado con el que hasta la fecha es el monumento de la civilización Maya más grande y antiguo jamás descubierto. Con una longitud de 1.413 metros y una anchura de 399 metros, esta estructura ceremonial revela nuevos detalles sobre la civilización del continente americano. Y ha sido descubierta haciendo uso de LiDAR, la misma tecnología que usan los coches autónomos para «ver».
En un estudio publicado en Nature los investigadores comentan interesantes aspectos sobre su descubrimiento. Se trata de una especie de meseta que mide casi kilómetro y medio de largo y medio kilómetro de ancho. En cuanto a su altura, calculan que es entre 10 y 15 metros. Es, literalmente, una meseta artificial. Está compuesta por tierra y arcilla.
Sobre ella se han encontrado lo que parecen ser dos edificaciones. La primera de ellas y quizás la más relevante es una pirámide de unos 15 metros de altura. Por otro lado hay una construcción más alargada que alcanza unos 400 metros de longitud. A diferencia de otros monumentos mayas, está construido en arcilla y no piedra. Esto quizás se deba a su antigüedad, tiene cientos de años más que otros monumentos mayas más populares, por lo que los materiales de construcción también son más rudimentarios.
¿Su utilidad? Dada a su similitud con otras estructuras encontradas en otras áreas habitadas por los mayas, los investigadores creen que se utilizaba para estudiar los movimientos de los astros. Esta relación con los astros implica también un fuerte enlace con rituales religiosos.
Un último aspecto interesante es la posible igualdad jerárquica que los arqueólogos han deducido sobre la población. Dada la ausencia de estatuas u otros elementos para representar individuos de alto estatus los investigadores creen que existía una sociedad más igualitaria y sin realeza en estas primeras etapas de la civilización maya. Es una de las civilizaciones históricas más importantes de la humanidad, aunque su final es algo decepcionante.
Un mapeo láser para obtener un mapa 3D del área
Sin la tecnología láser no habría sido posible el descubrimiento de este nuevo monumento maya. Un escaneo aéreo con un láser ha permitido a los investigadores realizar un mapa 3D de lo que se escondía debajo de la superficie en Aguada Fenix, al sur de México y cerca de Guatemala. Es así como han podido identificar la meseta artificial. De hecho, indican que dada su inmensidad y a pesar de estar en una zona poblada, habría sido imposible sin un escaneo aéreo.
No es la primera vez que la tecnología LiDAR ayuda en la arqueología, precisamente en septiembre de 2018 vimos cómo utilizando esta tecnología láser los investigadores encontraron una infraestructura maya gigantesca y oculta en la selva de Guatemala. En octubre de 2019 se descubrió también una interesante infraestructura de canales de transporte debajo de la selva haciendo uso del LiDAR.
El uso del LiDAR de hecho es bastante común desde hace años para analizar la composición del suelo y encontrar posibles estructuras. Sin embargo aún hay muchas áreas por explorar y edificaciones que descubrir.