Las últimas temporadas le vienen generando algunos dolores de cabeza a un par de históricos de la Liga Nacional. En la 16/17, Boca tuvo que parirla para salvar la categoría en la serie por la permanencia contra Echagüe. Y esta vez, a Ferro le tocará sufrir el mismo camino. El Verdolaga no pudo enderezar el rumbo de una segunda mitad de campaña muy pobre y, pese a ganarle anoche a Hispano en Río Gallegos (88-85), tendrá que jugar una serie (desde el miércoles) ante Salta Basket para mantener su lugar en la elite. Lo que lo terminó condenando fue el triunfo de Quilmes, justamente ante los norteños, por 87-78.
El conjunto de Laginestra aguantó el palo a palo de movida, con los dos a puro triple (5-5 para cada lado). Pero esa ventaja mínima del cuarto inicial (23-22) se esfumó en cuanto el dueño de caso levantó su intensidad defensiva. Así generó pérdidas (4 en el 2º), corrió un par de veces y, sobre todo, tuvo paciencia e inteligencia para mover la bola y encontrar buenas opciones (12 asistencias en 18 conversiones en el PT). Con el buen ingreso de Vasirani (6) y la mano de Tábarez (4-5 en bombas), los de Richotti llegaron a sacar una máxima de 12 (45-33) a los 18m.
El dueño de casa llegó a sacar 14, pero Ferro entendió que en la defensa estaba la llave. Se arrimó con un buen cierre del tercer cuarto y controló todo en los primeros siete minutos del último. Esa fortaleza atrás le dio fluidez y confianza adelante: cayeron cuatro triples (Harper, Balbi y dos de Johnson), la jerarquía de Balbi para conducir hizo daño, y con un gran parcial de 22-6, los de Caballito sacaron 11 (85-74) a 3m23. Ojo, igual sufrieron hasta el final, una constante del año. Y así lo será para seguir en la elite.
