Un grupo de investigadores de Stanford ha desarrollado una nueva arquitectura OLED con la que dicen alcanzar hasta 10.000 ppp (píxeles por pulgada) de densidad (¡no es la primera!). Para ponerlo en contexto, un panel OLED actual en móviles alcanza alrededor de los 450 ppp. La nueva tecnología ha sido probada en colaboración con Samsung, que espera desarrollar un panel a tamaño completo y comercial utilizando esta nueva arquitectura.
Una mayor densidad de píxeles por pulgada implica una mayor resolución final en la pantalla. Esto sin embargo no es sencillo de conseguir, por el hecho de que hay que mejorar la miniaturización de los elementos dentro del panel. Si bien en pantallas móviles ya no tiene mucho sentido mejorar la densidad más allá de los 500 ppp (el ojo humano simplemente ya no distingue), sí que puede ser útil en otros ámbitos como la realidad virtual.
La luz que «fluye» a nanoescala
El proyecto ha sido llevado a cabo por el investigador Mark Brongersma de la Universidad de Stanford junto al Instituto de tecnología Avanzada de Samsung. Inicialmente la idea era crear un panel solar ultradelgado, aunque luego se dieron cuenta de que esta tecnología podía ser aprovechada también para pantallas. Todo tiene que ver en cómo se comporta la luz a nanoescala, donde según indican puede «fluir» de una forma similar al agua alrededor de los objetos.
Actualmente hay diferentes tipos de OLED, aunque en general la tecnología OLED principalmente utiliza subpíxeles rojos, verdes y azules (RGB por sus siglas en inglés). Cada subpixel se ilumina en el momento adecuado y en la cantidad adecuada para que la combinación de los tres colores permita la creación del resto de colores y de como resultado una imagen final. Sin embargo cada subpixel también debe tener un tamaño y altura diferente para que de como resultado el color deseado (rojo, verde o azul). Esto hace que se ocupe un espacio importante dentro del panel OLED.
La nueva tecnología esencialmente lo que hace es reducir el tamaño de los subpíxeles haciendo que todos tengan la misma altura. Para ello se implementa una «metasuperficie óptica» (una base de metal reflectante). Esta metasuperficie contiene un relieve a nanoescala que hace que la luz se comporte del modo deseado transformándola en los tres colores primarios. Como resultado se puede reducir considerablemente el espacio utilizado y así añadir más densidad a los paneles OLED.
Los investigadores del proyecto han creado con éxito una prueba de concepto en el laboratorio. Dicha prueba de concepto dicen que tenía una mayor pureza de color y eficiencia de luminancia con respecto a los paneles OLED tradicionales. Adicionalmente, por supuesto, una densidad de píxeles mucho mayor que permitía llegar hasta los 10.000 ppp.
Ahora el objetivo es desarrollar una pantalla a tamaño completo cone esta nueva tecnología, Samsung dice que está en ello. Donde más sentido tiene ahora mismo estos paneles con una densidad espectacular es en realidad virtual y realidad aumentada. Por el tamaño de las pantallas de estos dispositivos y su cercanía al ojo es necesarios aumentar mucho más la densidad que en móviles para evitar que el ojo pueda distinguir los píxeles. Veremos si se consigue próximamente y, sobre todo, cuál es el coste de ello.
Vía | Stanford News