Un
empleado
decidió
eliminar
de
sus
dispositivos
todas
las
aplicaciones
relacionadas
con
la
comunicación
con
su
empresa,
después
de
que
sus
superiores
impusieran
la
política
de «no
trabajar
desde
casa».
El
tema
es
que,
a
pesar
de
que
el
teletrabajo
estaba
prohibido,
sus
jefes
le
escribían
fuera
del
horario
de
oficina.
Quitando
las
apps
laborales
ya
nunca
puede
estar
disponible
después
del
horario
de
oficina
y
así
cumple
con
su
política
de
no
trabajar
desde
casa,
a
rajatabla.
Originalmente,
el
hombre
compartió
la
historia
en
Reddit,
en
el
subreddit
llamado
Antiwork
que
tiene
muchas
publicaciones
interesantes,
y
con
el
tiempo
la
eliminó.
Pero
como
internet
no
olvida,
puedes
encontrar
su
post
en
capturas
de
pantalla
que
gente
ha
compartido
en
redes
sociales
e
incluso
en
medios
de
comunicación.
Fuera
Teams,
fuera
mail
En
la
publicación,
el
hombre
explica
que
trabaja
en
el
sector
tecnológico
y
realiza
la
mayor
parte
de
su
trabajo
de
forma
remota.
Sin
embargo,
como
su
empresa
ahora
lo
quiere
en
la
oficina,
el
empleado
eliminó
el
correo
electrónico
y
Teams
de
su
teléfono.
Como
resultado,
ya
no
está
disponible
después
del
horario
de
oficina.
Captura
de
pantalla
En
la
publicación,
el
usuario
explica
que
trabaja
en
el
sector
tecnológico
y
realiza
la
mayor
parte
de
su
trabajo
de
forma
remota.
Sin
embargo,
como
su
empresa
ahora
lo
quiere
en
la
oficina,
el
empleado
eliminó
el
correo
electrónico
y
Teams
de
su
teléfono.
Como
resultado,
ya
no
está
disponible
después
del
horario
de
oficina.
disponible
fuera
de
horario.
«Mi
jefe
intentó
llamarme
por
algo
urgente
anoche
y
no
pudo
localizarme.
Preguntó
por
qué
hoy
y
le
expliqué
lo
que
me
habían
dicho.
No
se
me
permite
trabajar
desde
casa».
Gente
con
historias
similares
Lo
que
no
se
eliminaron
fueron
los
comentarios
de
otras
personas
que
han
contado
cosas
similares
como
respuesta.
Uno
dice
que
hizo
lo
mismo
y
explica «cuando
uno
de
mis
jefes
me
preguntó
cómo
se
supone
que
se
pondría
en
contacto
conmigo,
le
dije
que
simplemente
llamara.
Pero
cuando
llaman,
lo
dejo
sonar
hasta
que
sale
el
buzón
de
voz.
Responderé
la
llamada
cuando
llegue
a
la
oficina».
Otra
persona
compartió
la
historia
de
alguien,
que
deja
bastante
claro
lo
absurdas
que
pueden
ser
las
políticas
empresariales
a
veces.
Una
mujer
que
trabajaba
ofreciendo
llamadas
de
apoyo
a
clientes
empresariales
de
todo
el
mundo,
por
lo
que
no
había
un
horario
definido.
Más
o
menos
cada
mes
viajaba
a
la
oficina
central
para
asistir
a
reuniones
y
ver
a
sus
compañeros
en
persona.
Uno
de
sus
superiores
no
estaba
de
acuerdo
e
incluso
hacía
comentarios
sarcásticos
sobre «debe
ser
agradable
poder
mirar
a
los
pájaros
mientras
trabajas«.
El
hombre
convenció
al
resto
para
obligar
a
la
trabajadora
a
ir
a
una
oficina
pero
como
las
centrales
estaban
muy
lejos,
le
alquilaron
un
espacio
más
cerca
de
su
residencia
para
hacerlo
su
oficina
a
donde
debía
ir
durante
el «horario
comercial».
Cuenta
que
esos
horarios
de
oficina
no
siempre
correspondían
con
el
horario
laboral
de
los
clientes,
por
lo
que
las
llamadas
eran
pocas
y
espaciadas
mientras
estaba
allí
sentada.
Decidió,
entonces,
nunca
responder
llamadas
fuera
de
horario,
lo
que
dejaba
a
muchísimos
clientes
sin
atender
y
la
empresa
acabó
volviendo
al
plan
inicial.
Imagen
|
Foto
de
Christina
@
wocintechchat.com
en
Unsplash
