Un incendio provocó la destrucción de gran parte de la estructura del asentamiento conocido como Villa Angelita, ubicado en calle 64 Norte entre la 40 y la 96, en la zona rural de Colonia Caroya.
Allí viven 13 familias, más de 50 personas y una treintena de niños y niñas. Cada habitación es un hogar diferente. Incluso algunos viven en el sótano.
Pero ayer a la tarde, el fuego originado por una «travesura» de un nene, provocó un desastre.
Los techos de nylon y los viejos tirantes de madera ardieron inmediatamente. Se quemaron muebles, electrodomésticos y ropa.
Milagrosamente no hubo heridos de consideración, a excepción de un joven que debió ser asistido en el Hospital por inhalación del humo.
Raúl Gutierrez, el propietario, decidió no moverse del lugar pese a que quedó inhabitable en gran parte.
Él, sus hijos y nietos prefirieron pasar la noche en las dos habitaciones del frente que no sufrieron daños, y rechazar la posibilidad de ser evacuados a un club.
Solidaridad.
Varias instituciones han iniciado campañas solidarias para ayudar a las familias, pero desde la Municipalidad piden que no se lleven al lugar porque no está en condiciones para recibir bolsones con ropa o más colchones.
Por eso, solicitan que la ayuda se centralice en la Casa de la Cultura mientras se espera por los peritajes de la estructura incendiada.
«Si es necesario voltear y volver a construir lo vamos a hacer, pero de acá no nos vamos», dijo Gutierrez.