Samsung
completó
un
año
espectacular
y
ha
arrancado
el
2024
de
la
mejor
manera.
La
familia
Galaxy
S24
ha
marcado
el
camino
de
la
gama
alta
y
el
Galaxy
S24
Ultra
concretamente
es
la
referencia
entre
los
más
premium.
Sin
embargo,
el
fabricante
coreano
acumula
el
grueso
de
ventas
en
la
gama
media,
específicamente
en
una
serie
Galaxy
A
que
se
expandió
con
los
superventas
Galaxy
A34
y
Galaxy
A54.
Dos
terminales
diferenciados
en
la
gama
media
y
aptos
para
el
gran
público:
buenas
cámaras,
autonomía
suficiente,
unos
paneles
AMOLED
de
altura,
y
en
general
dos
conjuntos
muy
equilibrados.
Cerrando
el
primer
trimestre
del
año,
tenemos
entre
nosotros
sus
sucesores,
de
los
cuales,
el
más
económico
ha
pasado
por
nuestra
mesa
de
pruebas.
En
caso
de
que
busques
un
gama
media
y
no
tengas
una
elección
clara,
Samsung
es
siempre
una
apuesta
segura.
Sigue
leyendo,
que
te
contamos
el
porqué
en
este
análisis
del
futuro
superventas
de
la
galaxia
más
conocida:
el
Samsung
Galaxy
A35
5G.
gana
dinero
Samsung:
el
secreto
está
en
el
IPHONE
Ficha
técnica
del
Samsung
Galaxy
A35
| 
Samsung | |
|---|---|
| Pantalla | 
AMOLED 
Full 
120 | 
| 
Dimensiones | 
161,7 
209 | 
| procesador | 
Exynos | 
| ram | 
6 | 
| almacenamiento | 
128 | 
| 
cámara | 
13 | 
| 
Cámara | 
50 
8 
5 | 
| Batería | 
5.000 
Carga | 
| 
Sistema | 
Android 
One 
4 | 
| Conectividad | 5G 
Wi-Fi 
Bluetooth NFC | 
| Otros | 
Lector IP67 
Altavoces 
Samsung | 
| Precio | 
SAMSUNG
Galaxy
A35
5G
128GB
con
Funda
Transparente,
Teléfono
Móvil
Android,
Smartphone
Libre,
6GB
RAM,
Batería
2
Días
de
Duración,
Cámara
50MP,
Amarillo
(Versión
Española)
*
Algún
precio
puede
haber
cambiado
desde
la
última
revisión
El
característico
diseño
se
mantiene
con
una
excepción
(para
mejor)
 

Nada
más
sale
de
su
caja
original,
queda
claro
que
la
anterior
generación
fue
un
éxito
para
el
reputado
fabricante
coreano.
¿Por
qué?
Pues
precisamente
porque
las
líneas
que
vimos
el
año
pasado
se
repiten
aquí,
en
este
Galaxy
A35.
Cuando
algo
funciones,
no
lo
toques,
han
debido
pensar
en
Samsung,
que
apuesta
por
el
policarbonato
para
unas
formas
muy
continuistas.
El
único
cambio
visible
es
la
anunciada «isla
de
botones»,
que
eleva
la
botonera
del
dispositivo
sobre
el
resto
del
lateral.
Los
materiales
premium
no
aparecen
en
este
Galaxy
A35;
tampoco
le
hacen
falta,
pues
su
construcción
se
siente
bien
en
mano
Se
siente
un
terminal
robusto,
algo
pesado,
pero
sobre
todo
muy
firme.
Estos
laterales
planos
que
terminan
en
esquinas
redondeadas
mejoran
la
ergonomía,
a
pesar
de
que
en
ocasiones
se
me
ha
resbalado
de
las
manos
con
facilidad.
La
trasera
imita
al
cristal,
sin
serlo
evidentemente,
y
quizá
es
el
apartado
estético
donde
más
apreciamos
el
rango
de
precio
al
que
va
dirigido
el
nuevo
Galaxy.
Esto
no
significa
que
me
parezca
malo;
todo
lo
contrario,
pues
es
elegante
a
la
vista
y
como
digo,
firme
en
mano,
denota
calidad
al
tacto.
 

La
novedad
de
Samsung
en
el
diseño
es
la
anunciada «isla
de
botones»
que,
sinceramente,
ayuda
mucho
a
encontrar
los
botones
cuando
no
podemos
mirarlo
Eso
sí,
no
puedo
negar
que
su
parte
trasera
es
un
imán
para
las
huellas.
No
es
tan
alarmante
como
en
otros
modelos
que
he
probado,
pero
sí
se
nota
sobremanera
cuando
la
luz
le
incide
directamente.
En
definitiva,
estéticamente
mantiene
lo
visto
en
la
anterior
generación,
que
ya
demostró
ser
un
conjunto
equilibrado,
y
aquí
han
pulido
un
par
de
aspectos,
justo
lo
que
le
faltaba.
Volteándolo,
encontramos
unos
laterales
muy
limpios,
algo
que
personalmente
me
encanta,
pues
se
han
repartido
los
botones
y
puertos
para
favorecer
su
uso.
 

En
el
lateral
derecho
encontramos
la
botonera,
dispuesta
en
una
pequeña «isla»
como
la
propia
Samsung
presume.
Esta,
tiene
la
disposición
habitual,
abajo
el
botón
de
desbloqueo
y
arriba
los
de
volumen.
En
el
marco
superior,
el
Galaxy
A35
aloja
la
bandeja
de
SIM
y
un
pequeño
orificio
para
el
micrófono.
Es
el
inferior
el
más
copado:
puerto
USB-C,
altavoz
y
micrófonos.
Hora
de
analizar
el
frontal,
la
parte
física
que
más
ha
cambiado
desde
el
Galaxy
A34.
 

Desde
el
momento
que
lo
vi,
me
pareció
un
calco
al
Galaxy
A54,
y
en
varios
aspectos
lo
es.
Luego
veremos
por
qué,
pero
el
frontal
ya
empieza
a
justificar
este
símil:
Samsung
despide
el
notch
tipo
gota,
que
suena
obsoleto
en
2024,
para
abrazar
la
habitual
perforación
circular.
Por
tanto,
nos
queda
un
frontal
dominado
por
la
pantalla
y
esa
pequeña
cámara
de
selfis,
y
lo
peor
del
panel:
unos
biseles
que
no
han
evolucionado.
Se
notan
demasiado,
y
son
uno
de
los
puntos
más
flojos
del
nuevo
gama
media.
No
es
que
hayamos
retrocedido
unos
años
atrás.
Sin
embargo,
afean
ciertamente
el
conjunto,
pues
se
apartan
de
la
sensación
todo
pantalla
que
otros
fabricantes
ya
ofrecen
en
este
segmento
de
mercado.
Ya
que
hablamos
del
panel,
entramos
de
lleno
a
analizar
la
experiencia
multimedia
que
ofrece
este
nuevo
Galaxy.
La
pantalla
luce
genial,
no
es
para
menos
pues
sus
especificaciones
ya
apuntaban
bien:
AMOLED,
FullHD+
y
tasa
de
refresco
de
120
hercios,
y
cumple
sobradamente
lo
que
el
papel
prometía.
Es
una
panel
con
bastante
saturación,
en
la
línea
de
Samsung,
muy
nítido
y
con
una
representación
del
color
más
que
apta,
siempre
que
nos
guste
la
interpretación
del
fabricante
coreano.
 

Además,
es
perfectamente
visible
incluso
bajo
la
influencia
del
sol
del
sur
de
España,
eso
sí,
elevando
el
brillo
al
máximo.
En
interiores,
es
un
socorrido
dispositivo
para
ver
un
ratito
de
streaming
o
YouTube,
pues
la
calidad
de
la
pantalla
invita
a
ello.
También
los
ángulos
de
visión
favorecen
el
disfrute,
así
como
los
120
hercios
convierten
la
interfaz
en
una
fiesta
de
animaciones
que
le
sienta
genial.
No
me
olvido
del
sonido,
proveniente
de
dos
altavoces
con
suficiente
volumen
y
cierta
garra.
Es
un
buen
conjunto
para
disfrutar
de
contenido
multimedia
Para
llamadas
y
notificaciones
basta
y
sobra,
no
tanto
si
somos
algo
exigentes
a
la
hora
de
escuchar
música.
Buen
balance
de
graves,
aunque
subiendo
el
volumen
por
encima
de
la
mitad
llega
a
perderse
el
equilibrio.
Usando
otro
móvil
para
medir
la
potencia,
me
ha
marcado
en
torno
a
los
90
dB,
nada
que
objetar
aquí.
En
caso
de
que
prefiramos
conectar
unos
auriculares,
nos
vemos
obligados
a
que
sean
Bluetooth,
pues
como
en
la
anterior
generación,
este
Galaxy
A35
prescinde
del
conector
jack
de
3,5
milímetros.
 

Sin
problemas
aparentes
en
la
vinculación
y
conexión
con
unos
Pixel
Buds
Pro:
obtenemos
un
sonido
muy
nítido,
además,
este
Samsung
viene
con
ciertos
códecs
que
mejoran
la
transmisión
de
audio
como
aptX,
AAC,
e
incluso
LDAC
de
Sony.
En
línea
con
los
accesorios
del
fabricante
coreano,
tenemos
el
SSC
que
mejorará
el
audio
Bluetooth
con
unos
Galaxy
Buds.
Ahora,
antes
de
entrar
de
lleno
en
el
rendimiento,
nos
queda
un
apartado
por
revisar:
la
biometría.
 

Se
agradece
que
en
la
gama
media
vayan
apareciendo
los
sensores
bajo
la
pantalla,
más
si
lo
hacen
de
esta
manera:
el
del
Galaxy
A35
funciona
a
las
mil
maravillas,
aunque
no
esté
exento
de
fallos
puntuales.
Como
sucede
con
otro
tipo
de
lectores
de
huellas,
es
recomendable
registrar
un
par
de
veces
el
mismo
dedo,
o
sino
cualquier
cambio
como
el
sudor
o
la
suciedad
hará
que
no
la
reconozca.
Me
parece
un
acierto,
aunque
no
es
novedad,
pues
su
antecesor
ya
contaba
con
esta
posibilidad.
Así
debería
funcionar
todo
gama
media
 

Mientras
analizaba
lo
referente
a
este
modelo,
tengo
claro
que
merece
mucho
más
la
pena
que
el
anterior
Galaxy
A34,
principalmente
por
lo
que
he
comentado
de
sus
semajanzas
con
el
Galaxy
A54.
Aquí
vuelven,
con
más
sentido
que
nunca:
el ‘cerebro’
de
este
gama
media
es
el
Exynos
1380
que
vimos
el
año
pasado.
Un
procesador
firmado
por
la
propia
Samsung
que
como
decimos
no
es
nuevo,
para
lo
bueno
y
para
lo
malo.
Lo
bueno
es
que
es
una
CPU
muy
equilibrada,
capaz
de
contener
el
consumo
de
energía
y
con
una
fuerza
bruta
suficiente
para
la
inmensa
mayoría
de
usuarios.
No
notaremos
tirones
ni
pantallas
de
carga
con
las
aplicaciones
más
populares;
tampoco
con
juegos
casuales.
Sus
cuatro
núcleos
Cortex-A78
le
otorgan
un
rendimiento
alto,
y
se
apoyan,
como
ocurría
en
la
anterior
generación,
de
6
u
8
GB
de
memoria
RAM.
Así,
consigue
una
multitarea
eficaz
y
sin
retardos,
aunque
evidentemente
lejos
del
rendimiento
de
chips
más
potentes.
 

Además,
tanto
el
procesador
como
la
GPU
Mali
que
lo
complementa,
aguantan
bien
el
peso
de
los
120
hercios,
por
más
que
en
alguna
ocasión
veamos
un
ligero
salto
en
las
animaciones
del
sistema.
En
definitiva,
es
un
salto
considerable
si
venimos
del
modelo
que
lo
precede.
Quizá
el
cambio
más
palpable
sin
que
sea
radical.
Ahora
bien,
para
ponerlo
en
contexto
con
la
competencia,
optamos
por
un
par
de
pruebas
sintéticas
donde
relucen
sus
bondades
y
también
sus
debilidades.
 

| 
samsung | 
samsung | 
samsung | 
poco | 
REALME | |
|---|---|---|---|---|---|
| procesador | 
Samsung | 
MediaTek | 
Samsung | 
Qualcomm | 
Mediatek | 
| ram | 
8 | 
8 | 
8 | 
12 | 
8 | 
| 
GEEKBENCH | 
1.019 | 
1.025 | 
997 | 
1.025 | 
937 | 
| 
3D | 2.809 | 2.228 | – | 3.050 | 2.253 | 
| 
PCMARK | 13.303 | 11.245 | 12.785 | 12.791 | 13.952 | 
Es
complicado
imaginar
un
móvil
de
Samsung
sin
su
característica
capa
de
personalización,
que
en
mi
opinión
está
en
mejor
forma
que
nunca.
Se
nota
sobremanera
en
este
Galaxy
A35,
capaz
de
exprimir
las
posibilidades
de
One
UI
6.1,
a
pesar
de
que
adolezca
la
falta
de
las
características
premium
que
le
otorgó
la
IA
a
la
familia
Galaxy
S24.
Tampoco
le
hacen
falta,
pues
tenemos
un
sistema
que
identifica
al
fabricante,
tiene
muchas
funciones
extra,
y
la
fluidez
que
antañó
no
tuvo
rebosa
en
cada
rincón.
El
One
UI
6.1
de
este
Galaxy
A35
no
tiene
las
funciones
de
Galaxy
AI.
Su
hardware
no
es
suficiente
para
la
inteligencia
artificial
Vale
que
no
es
el
software
más
rápido,
ni
el
más
bonito,
pero
sabemos
que
estamos
ante
un
Galaxy
por
lo
características
de
sus
formas,
colores,
iconos
y
ventanas.
En
este
Galaxy
A35,
tenemos
lo
último
de
lo
último;
One
UI
6.1
se
alinéa
junto
a
Android
14
y
un
soporte
a
largo
plazo
que
muchos
desearían.
Porque
sí,
este
modelo
de
gama
media
actualizará
durante
cuatro
años,
lo
mismo
que
buques
insignia
de
otros
fabricantes,
ahí
es
casi
nada.
 

Sí
es
fácil
quejarse
del
bloatware,
que
sin
ser
tan
alarmante
como
en
otros
casos,
nos
hace
desinstalar
apps
de
streaming,
de
redes
sociales,
e
incluso
algún
juego
casual
desconocido.
Por
no
hablar
de
la
suite
de
Microsoft,
que
es
útil
si
realmente
la
usamos.
Por
suerte,
se
puede
borrar
del
mapa
con
la
desinstalación
y
en
última
instancia
con
la
opción
de
desactivar.
Al
hilo
de
las
actualizaciones:
sale
al
mercado
también
al
día
con
los
parches
de
seguridad,
poseyendo
la
versión
de
febrero
de
2024.
One
UI
6.1
alcanza
un
buen
nivel
de
madurez
con
una
suite
de
herramientas
útiles
y
muy
bien
diseñadas
Me
gustan
la
completa
galería
de
Samsung,
su
gestion
de
las
notificaciones,
la
estética
de
los
ajustes
rápidos,
y
muchas
de
las
aplicaciones
nativas
que
incorpora.
Como
también
la
posibilidad
de
añadir
más
memoria
RAM
a
través
de
la
memoria
virtual,
algo
que
el
fabricante
bautiza
como ‘RAM
Plus’
y
es
habitual
en
las
múltiples
capas
de
Android
provengan
de
quien
provengan.
No
me
puedo
parar
a
hablar
extensamente
de
joyitas
como
Good
Lock,
que
son
capaces
de
multiplicar
las
opciones,
algo
que
pocos
consideran
pero
que
suma
(y
mucho)
al
ecosistema
Samsung.
 

Poco
se
habla
de
lo
importante
que
es
el
software
para
la
autonomía
de
los
dispositivos:
es
determinante.
Con
un
procesador
conocido
para
la
firma
coreana,
ha
sido
más
sencillo
lograr
el
software
que
hemos
repasado
juntos.
Por
ello,
no
esperaba
menos
de
este
nuevo
Galaxy
A35:
llegar
a
los
dos
jornadas
completas
es
posible,
sin
excederse
con
apps
exigentes,
claro
está.
Con
una
batería
de
5.000
mAh,
y
un
panel
bastante
generoso,
no
es
tan
fácil
conseguirlo,
de
hecho,
cuando
la
apretamos
un
poco
más
de
la
cuenta
con
GPS
veremos
el
porcentaje
decaer
más
rápidamente.
Los
dos
días
de
autonomía
están
asegurados,
a
menos
que
lo
exprimamos
con
un
uso
intensivo
de
GPS
o
largas
sesiones
de
gaming
Durante
el
tiempo
que
lo
he
estado
utilizando,
he
conseguido
unas
cinco
horas
de
pantalla
de
media,
hora
arriba
o
abajo
dependiendo
del
tipo
de
uso.
Por
lo
tanto,
estamos
ante
un
terminal
que
aguanta
las
48
horas
sin
pasar
por
el
enchufe
con
algo
más
de
dos
horas
de
pantalla
activa
por
día.
Creo
que
es
lo
mínimo
exigible,
observando
a
la
competencia,
por
lo
que
cumple
sin
llegar
a
sobresalir.
No
destaca
tanto
precisamente
frente
a
rivales
muy
directos
en
la
carga
rápida:
25
vatios
es
suficiente
pero
no
lo
mejor.
Las
casi
dos
horas
de
carga,
si
llega
a
agotarse
la
batería
al
completo,
están
aseguradas.
 

No
conviene
olvidar
que
se
necesita
un
cargador
con
estas
especificaciones,
pues
la
caja
original
trae
únicamente
el
cable
USB.
¿Quieres
mas
sobre
la
carga
de
batería?
Esto
es
lo
que
ha
tardado
en
completar
su
batería
hasta
el
100%.
- 
 5
 minutos
 de
 carga:
 10
 %
 de
 batería.
- 
 10
 minutos
 de
 carga:
 16
 %
 de
 batería.
- 
 20
 minutos
 de
 carga:
 26
 %
 de
 batería.
- 
 30
 minutos
 de
 carga:
 36
 %
 de
 batería.
- 
 50
 minutos
 de
 carga:
 55
 %
 de
 batería.
- 
 Total:
 105
 minutos
 de
 carga
 aproximadamente.
Samsung
le
tiene
pillado
el
punto
a
la
cámara
principal
 

No
hacen
falta
tantas
cámaras
como
los
fabricantes
nos
dan
hoy
en
día.
Si
son
para
destacar
y
complementar
a
la
principal,
genial.
Precisamente
no
es
esto
lo
que
veo
en
la
gama
media
de
los
últimos
tiempos,
aunque
no
significa
que
no
tengamos
unos
sensores
muy
competentes
en
la
mayoría
de
escenarios.
Lo
que
vimos
con
el
Galaxy
A34
se
repite:
el
salto
de
los
48
a
los
50
megapíxeles
no
supone
un
importante
cambio,
sí
lo
provoca
el
cambio
de
sensor.
Sobre
el
papel,
el
apartado
de
fotografía
no
parece
muy
diferente.
En
la
práctica,
no
ha
salido
mal
parado
Toca
mencionar
las
tres
cámaras
incrustadas
en
la
trasera
sin
módulo
visible,
un
detallito
de
Samsung,
de
esos
que
al
mirarlo
en
un
parpadeo
sabes
quién
lo
ha
fabricado.
Al
sensor
principal
se
le
añade
un
ultra
gran
angular
de
8
megapíxeles
demasiado
familiar
-básicamente
el
mismo
del
A34-
y
un
sensor
macro
de
5
megapíxeles
para
alguna
fotografía
con
foco
cercano.
Volviendo
al
sensor
principal,
el
cambio
del
Sony
IMX
al
LYT
-con
el
consiguiente
aumento
en
el
tamaño
del
píxel-
mejora
lo
que
vimos
el
año
pasado,
sin
ser
una
diferencia
muy
abultada.
En
definitiva,
nada
nuevo
que
no
tengan
sus
rivales.
Quizá
no
le
haga
falta,
porque
después
de
un
tiempo
tirando
fotos
por
doquier,
me
ha
sorprendido
para
bien:
este
sensor
firmado
por
Sony
consigue
unas
imágenes
con
gran
detalle
y
rango
dinámico
durante
el
día,
y
por
la
noche
no
termina
de
pecar
tanto
como
en
la
anterior
generación.
Mucho
tiene
que
ver
la
app
nativa
de
cámara
incluida
en
One
UI
6.1,
que
además
de
brindar
muchas
opciones,
ha
mejorado
el
procesado.
 

Tanto
si
venimos
de
un
Galaxy
como
si
no,
no
tendremos
problemas
en
comprender
esta
app
de
cámara:
disposición
horizontal
de
pestañas
para
cambiar
entre
los
modos
de
foto,
vídeo,
retrato,
y
los
que
se
pueden
añadir
desde
el
apartado
«Más».
Aunque
no
estemos
frente
a
un
gama
alta,
el
Galaxy
A35
cuenta
con
modo
un
modo
«Pro»
que
permite
manejar
los
parámetros
habituales.
No
captura
en
RAW,
por
cierto,
y
me
ha
resultado
interesante
que
en
los
ajustes
de
opción
aforzar
los
50
megapíxeles
en
toda
la
app.
Ahora
vemos
cómo
trabaja
el
procesado
empezando
por
una
toma
a
plena
luz
del
día,
donde
resaltan
todas
sus
virtudes
pero
también
algún
que
otro
defecto:
buena
interpretación
del
color
elevando
la
saturación,
un
efecto
muy
de
Samsung;
también
una
gran
nitidez,
apreciable
en
los
bordes.
Lo
que
no
termina
de
afinar
es
en
las
sombras,
con
un
contraste
algo
exagerado.
A
pesar
de
esto,
diría
que
tenemos
una
cámara
principal
similar
a
la
del
Galaxy
A54
del
año
pasado.
El
ISO
se
mantiene
a
raya
siempre
que
haya
luz,
incluso
lo
disminuye
mejorando
el
resultado.
 

Como
acostumbran
estos
últimos
años
los
fabricantes,
tenemos
un
botón
para
hacer
un
x2
rápidamente.
El
Galaxy
A35
no
lo
tiene
por
contar
con
un
telefoto,
pero
la
resolución
del
sensor
principal
consigue
un
recorte
bastante
aceptable
como
vemos
a
continuación.
En
un
entorno
sin
demasiada
luz,
no
eleva
el
ISO
y
representa
la
escena
adecuadamente:
aquí
el
rango
dinámico
decae,
sin
alejarse
de
lo
que
veían
mis
ojos.
Podemos
usar
este
zoom
sin
preocuparnos
para
tomas
casuales,
eso
sí,
la
definición
pierde
con
bordes
acuarelados.
 

De
noche,
como
es
natural,
comienza
a
adolecer
la
falta
de
luz.
¿Cómo
sostiene
la
captura?
Pues
bien,
subiendo
el
ISO
sobremanera.
Esto
provoca
un
mayor
ruido
en
la
imagen
que
si
bien
es
palpable
no
será
demasiado
notable
sin
aplicar
recorte
o
haciendo
zoom
desde
la
galería
de
Samsung.
Sobreexpone
las
altas
luces,
aunque
curiosamente
el
contraste
mejora
respecto
al
día,
siendo
más
equilibrado.
 

Estas
pequeñas
pegas
se
arreglan
haciendo
uso
del
«Modo
noche»
que
nos
aconsejará
mantener
estable
el
móvil
y
se
tomará
unos
segundos
hasta
mostrar
la
captura.
Eso
sí,
de
esta
manera
conseguimos
una
representación
más
realista
con
unas
luces
más
elevadas;
la
nitidez
también
mejora.
No
todos
los
resultados
son
iguales:
depende
mucho
de
la
escena
que
merezca
la
pena
activarlo
o
no.
 

No
me
olvido
del
ultra
gran
angular
de
8
megapíxeles.
Un
sensor
que
si
bien
no
parece
haber
mejorado
mucho
no
queda
muy
desemparejado
con
la
cámara
principal,
siempre
hablando
de
escenarios
diurnos
y
salvando
las
distancias
en
la
resolución.
Sin
luz,
salva
alguna
foto
casual,
dejando
los
detalles
en
el
camino.
 

A
modo
de
resumen
sobre
la
experiencia
fotográfica
del
Galayx
A35:
me
ha
parecido
un
buen
conjunto
que
satisfará
a
la
mayoría
de
usuarios,
en
parte
gracias
a
ese
tratamiento
tan ‘Made
in
Samsung’
que
realza
los
colores
sin
dejar
atrás
la
nitidez
de
las
formas
que
he
capturado.
 

La
cámara
frontal
de
13
megapíxeles
se
defiende
bien,
sin
ofrecer
nada
nuevo
ni
diferente.
Junto
al
modo
retrato
nos
permite
sacar
un ‘selfi’
más
que
aceptable,
con
bastante
detalle
en
el
rostro
y
un
recorte
del
fondo
bien
hecho.
No
es
la
mejor
ni
pretende
serlo,
eso
sí,
satisfará
al
usuario
que
adquiera
este
nuevo
Galaxy.
 

A
pesar
de
no
ser
su
fuerte,
la
grabación
de
vídeo
cumple,
sobre
todo
en
resolución:
el
Galaxy
A35
es
capaz
de
grabar
a
4K.
En
esta
resolución
no
lo
hace
a
60
fotogramas,
algo
que
sí
permite
en
1080p.
Al
final,
la
que
más
usaremos
será
la
combinación
1080p/30fps
debido
a
que
en
esta
permite
activar
la
estabilización
por
software,
que
todo
sea
dicho:
endereza
los
vaivénes
que
se
producen
al
caminar.
Samsung
Galaxy
A35,
la
opinión
de
Xataka
Android
 

La
nueva
propuesta
de
Samsung
para
la
gama
media
convence
en
cuanto
pasas
un
rato
con
él:
prevalece
un
conjunto
equilibrado,
con
un
mejor
procesador
que
el
año
pasado
(sin
ser
un
cambio
radical)
y
manteniendo
todo
lo
que
ya
lo
hacía
destacar.
A
pesar
de
no
rivalizar
en
precio
con
alternativas
de
fabricantes
chinos,
el
pasar
de
los
meses
hará
decrecer
esta
cifra,
volviéndolo
muy
apetitoso.
En
2023,
merecía
la
pena
elegir
el
Galaxy
A54
sobre
el
A34.
Este
año
tengo
más
dudas
Está
claro
que
este
es
el
superventas
de
Samsung
para
este
2024
-con
permiso
de
su
hermano
mayor,
el
Galaxy
A55-
y
es
que
si
en
la
generación
anterior
sí
merecía
la
pena
dar
el
salto
a
la
versión
superior,
en
esta
no
parece
ser
tan
necesario.
En
definitiva,
este
Galaxy
A35
proporciona
una
buena
experiencia
del
ecosistema
Samsung
sin
que
sintamos
la
necesidad
de
gastar
más
dinero.
7,3
Diseño
6,75
Pantalla
7,5
Rendimiento
7,25
Cámara
7
Software
7,5
Autonomía
8
A
favor
- 
El
 procesador
 Exynos
 rinde
 bien
 un
 año
 más
 tarde
- 
Un
 conjunto
 equilibrado
 en
 todos
 los
 apartados
- 
El
 software
 de
 Samsung
 es
 rico
 en
 funciones
- 
Cámaras
 continuistas
 algo
 superiores
 a
 la
 de
 la
 pasada
 generación
- 
Lector
 de
 huellas
 en
 pantalla
 muy
 fino
En
contra
- 
No
 tiene
 la
 mejor
 carga
 rápida
 de
 este
 rango
 de
 precio
- 
Precio,
 que
 por
 cierto,
 podría
 ser
 algo
 más
 ajustado
- 
La
 cámara
 principal
 podría
 mejorar
 los
 resultados
 nocturnos
SAMSUNG
Galaxy
A35
5G
128GB
con
Funda
Transparente,
Teléfono
Móvil
Android,
Smartphone
Libre,
6GB
RAM,
Batería
2
Días
de
Duración,
Cámara
50MP,
Amarillo
(Versión
Española)
*
Algún
precio
puede
haber
cambiado
desde
la
última
revisión
 
            








































