El
invierno
está
en
sus
temperaturas
mínimas
y
eso
puede
afectar
a
las
ganas
de
entrenar
y
al
rendimiento
en
la
sesión
de
ejercicio
en
exteriores.
La
exposición
al
frío
no
tiene
que
ser
una
barrera
para
realizar
deporte,
de
hecho
los
humanos
estamos
preparados
con
mecanismos
muy
complejos
de
termorregulación
diseñados
para
adaptarnos
a
grandes
cambios
de
temperatura,
especialmente
a
entornos
fríos.
Proyecto
Reducir
Lesiones
en
Runners
El «frío»
no
lo
es
si
se
controlan
algunos
factores

El «frío»
es
un
factor
estresante
fisiológico
en
el
que
el
entorno
ambiental
perjudica
el
rendimiento.
Ese
frío
no
depende
únicamente
de
la
temperatura
porque
dos
personas
expuestas
a
una
temperatura
de
5ºC
pueden
tener
calor
y
frío
en
función
de
su
ropa
o
si
está
practicando
ejercicio
físico.
La
lluvia
y
el
viento
pueden
crear
condiciones
muy
diferentes
debido
a
una
caída
fatal
en
la
temperatura
corporal
central.
De
hecho,
es
en
esas
condiciones
mezcladas
de
frío
con
lluvia
y
viento
cuando
se
dan
catástrofes
como
muertes
por
hipotermia
en
competiciones
deportivas.
El
Colegio
Estadounidense
de
Medicina
del
Deporte
considera
que
el
ejercicio
puede
realizarse
de
forma
segura
en
la
mayoría
de
los
entornos
con
clima
frío,
sin
incurrir
en
lesiones
por
frío,
siempre
que
se
emplee
una
estrategia
integral
de
gestión
de
riesgos.
Los
tres
factores
principales
que
debemos
considerar
con
respecto
a
la
seguridad
de
entrenar
con
frío
A
la
hora
de
realizar
ejercicio
físico
en
exteriores
hay
tres
factores
principales
que
hemos
de
tener
en
cuenta:
la
temperatura,
la
duración
de
la
exposición
y
la
ropa
u
otra
protección
contra
el
frío.
La
unión
de
estos
tres
factores
hace
que
haya
competiciones
que
se
puedan
suspender,
aunque
si
no
vives
en
zonas
extremadamente
frías
de
15º
–
20ºC
bajo
cero,
y
utilizas
la
ropa
adecuada,
no
tiene
que
haber
ningún
problema.
El
control
de
los
tres
factores
principales
que
afectan
al
rendimiento
en
clima
frío

La
fuerza
contráctil
de
los
músculos
esqueléticos
disminuye
con
frío,
viendo
reducidas
cualidades
como
la
velocidad
o
las
tareas
explosivas.
No
podemos
cambiar
la
temperatura
exterior,
pero
sí
la
temperatura
corporal
mediante
un
calentamiento
progresivo
y
la
ropa
correcta.
Calentamiento
muy
progresivo
La
principal
diferencia
de
un
calentamiento
con
frío
o
sin
él
es
la
progresión
de
intensidad.
Si
bien
un
calentamiento
siempre
ha
de
ser
progresivo,
con
frío
debemos
tenerlo
aún
más
en
cuenta.
Incluso
si
entrenamos
en
interiores,
levantando
pesas
en
el
gimnasio
por
ejemplo,
y
hemos
caminado
hacia
la
instalación
con
frío,
ese
calentamiento
también
tiene
que
comenzar
con
una
intensidad
muy
baja.
Más
intensidad
y
menos
duración
para
momentos
muy
fríos
Respecto
a
la
duración
de
la
exposición
podemos
jugar
con
el
momento
del
día
para
hacer
tiradas
más
largas
o
entrenamientos
más
cortos
de
cierta
intensidad.
Está
claro
que
cuanto
más
tiempo
estamos
expuestos
al
frío,
peor
lo
llevará
nuestro
cuerpo.
Es
por
ello
que
entrenar
salir
a
correr
a
las
siete
de
la
mañana
o
las
nueve
de
la
noche
supondrá
enfrentarnos
a
temperaturas
más
bajas
que
si
corremos
a
las
una
de
la
tarde.
El
horario
laboral
es
el
que
dictamina
esa
franja
horaria
de
entrenamiento,
pero
puedes
aprovechar
para
hacer
tus
sesiones
más
intensas
y
de
menor
duración
en
esos
horarios
de
grados
más
bajos,
y
sesiones
más
largas
y
menos
intensas
en
fines
de
semana
o
momentos
en
los
que
puedas
entrenar
a
mitad
del
día.
Ropa
adecuada
para
el
frío
Seguro
que
has
visto
documentales
en
los
que
las
personas
están
expuestas
a
temperaturas
muy
por
debajo
de
cero.
Esas
personas
puede
parecer
que
tienen
un
abrigo
igual
que
el
tuyo,
pero
si
son
profesionales
su
abrigo
es
muy
diferente,
y
mucho
más
caro,
eso
sí.
La
diferencia
entre
un
chaquetón
y
otro
no
es
lo
abultado
que
sea,
es
su
confección.
Al
igual
que
unos
guantes
básicos
no
te
quitan
el
frío
de
los
dedos,
y
unos
de
mayor
calidad
sí
lo
hacen,
escoger
ropa
técnica
de
entrenamiento
para
el
frío
es
fundamental.
En
las
tiendas
deportivas
puedes
encontrar
diferentes
gamas
de
calidad
y
precio.
A
priori,
si
no
llevas
mucho
entrenando
o
no
te
detienes
en
ello,
puede
que
tres
pares
de
calcetines
sean
iguales
para
ti,
pero
cuando
pruebas
cada
uno
de
ellos
notas
la
razón
de
su
diferencia
en
el
precio.
Utiliza
ropa
ligera
protectora,
guantes
y
gorro
para
esas
zonas
principales
que
se
hielan
muy
pronto,
y
no
te
olvides
de
unos
calcetines
de
calidad
para
que
los
pies
no
se
congelen.
La
diferencia
entre
correr
a
20ºC
o
a
2ºC
puede
desaparecer
con
el
calentamiento
progresivo
adecuado,
cuidando
el
tiempo
de
exposición
al
frío
y
con
la
ropa
protectora
de
calidad.
Referencias
Castellani
JW,
Young
AJ,
Ducharme
MB,
Giesbrecht
GG,
Glickman
E,
Sallis
RE;
American
College
of
Sports
Medicine.
American
College
of
Sports
Medicine
position
stand:
prevention
of
cold
injuries
during
exercise.
Med
Sci
Sports
Exerc.
2006
Nov;38(11):2012-29.
doi:
10.1249/01.mss.0000241641.75101.64.
PMID:
17095937.
En
Vitónica
|
Boticaria
García
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cómo
reforzar
las
defensas
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invierno
con
estos
suplementos