Avanzado noviembre nos metemos de lleno en el mes de transición hacia las inevitables fiestas que acechan cada vez antes detrás de la esquina. Ya con días mucho más frescos y los típicos temporales otoñales, nos refugiamos en la cocina para buscar confort en platos cálidos, fáciles y saludables, que sean bien sabrosos y nos ayuden a comer equilibrado.
Sopas, cremas vegetales, legumbres, productos de temporada, algo de carne y pescado, el comodín de los huevos… planificando un poco será fácil organizar comidas y cenas equilibradas que gusten a todos en casa, y nuestras recetas siempre se pueden adaptar al gusto o a necesidades concretas.
¿Sigues una dieta totalmente vegetal? Sustituye las proteínas animales por tofu, seitán, tempeh o legumbres ya cocidas. ¿No encuentras níscalos? Usa cualquier otra seta, aunque sea de cultivo o en su versión congelada. ¿Quieres aumentar la cantidad de proteínas? Añade garbanzos crujientes o unas sardinillas a ensaladas o platos de cuchara, engorda las cremas con queso batido desnatado o cottage, o sirve los potajes y sartenadas con huevos.
Y si quieres aumentar el consumo de verduras en casa o tienes niños que no las toleran muy bien, prueba algo tan rico y fácil como las acelgas gratinadas con bechamel y parmesano, receta que se puede adaptar a muchos otros vegetales.
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