La primera operación será dorar la carne en su exterior, para que tenga mejor color y para que se produzca la caramelización de sus azúcares naturales en la llamada reacción de Maillard, que proporcionará mejor sabor a la salsa y un buen aspecto para la vista. Podéis hacerlo en una plancha amplia o como hice yo en una paella para tener sitio para manejaros con comodidad.
Mientras la carne se va dorando, picamos las cebollas en juliana fina y las disponemos en una fuente de horno como una base o cama sobre la que pondremos la carne cuando esté dorada. Añadimos un chorrete de aceite de oliva sobre la cebolla, un pellizco de sal y colocamos la carne encima.
Sobre la carne añadimos las cucharadas soperas de soja oscura que aportará el sabor salado que enriquecerá nuestra salsa y seguidamente las cucharadas de miel (tamaño postre), intentando que se vaya repartiendo por la superficie. La miel dará el contraste dulzón a nuestra salsa. Si no encontráis soja oscura, más densa y concentrada, podéis usar soja normal pero usando más cantidad (unas 8 cucharadas en ese caso).
Horneamos a 160ºC durante una hora aproximadamente, dependiendo del peso de la carne y el horno de cada uno, procurando dar la vuelta a la carne a mitad de la cocción. Yo aproveché dicha operación para remover con una cuchara de palo las cebollas para que se repartieran de nuevo y se fueran haciendo por igual. Servimos la carne fileteada con la cebolla y la salsa en un cuenco aparte. Si lo preferís podéis triturarla pero en casa preferimos disfrutar de los tropezones. Cuestión de gustos de cada familia.
Con qué acompañar la receta de redondo de ternera asado con soja y miel
El redondo de ternera asado con soja y miel, es un asado de carne de los tradicionales, de los que siempre quedan bien y sus notas dulzones lo hacen estupendo para plato único, acompañado por ejemplo, de una ensalada de pimientos asados o de unos buñuelos de patatas y espinacas como guarnición.