Al momento de cuidar la línea y la salud, son muchos las estrategias o recursos que podemos poner en práctica, entre ellas un tipo de alimentación que marca tendencia en la actualidad denominado clean eating o comer limpio. Te contamos de qué se trata y consejos para lograrlo.
¿Qué significa comer limpio o clean eating?
Cuando hablamos de clean eating o de comer limpio, hablamos de un tipo de alimentación basado en la ingesta de alimentos en su forma más simple o natural posible.
Así, no se trata de la higiene de los alimentos sino de alejarnos de lo nocivo que la industria a incorporado en nuestra dieta, eliminando de esta forma todo tipo de alimentos procesados y ultraprocesados, refinados, o productos originados mediante una agricultura no ecológica ni orgánica, entre otros.
El comer limpio se basa entonces en la ingesta de comida real pero llevada con el más mínimo detalle, ya que ni siquiera alimentos con escaso procesamiento que pueden resultar de mucha ayuda para comer más sano como por ejemplo, vegetales congelados, legumbres en conserva o pasta integral seca es aceptada cuando se busca poner en práctica el clean eating.
Es decir, cuando buscamos sumarnos a este tipo de alimentación tenemos que pensar en que los alimentos que formarán parte de nuestra mesa serán aquellos orgánicos u ecológicos y sobre todo, los que se presentan tal como la naturaleza les dio origen, pudiendo después elaborar con ellos todo tipo de platos.
Las ventajas y desventajas del clean eating
En una población donde lo industrial es predominante y donde gran parte de lo que comemos tiene su origen allí, el clean eating no resulta fácil de aplicar pero puede tener grandes ventajas al alejarnos de ultraprocesados de bajo perfil nutricional y acercarnos a más alimentos frescos con buenos nutrientes.
Así, quien lleva este tipo de alimentación sin duda no ingerirá harinas refinadas ni grasas trans de origen industrial. Mucho menos azúcar de mesa y otros azúcares libres producto de la industria alimentaria.
De igual forma, el clean eating nos permite alejarnos de todo tipo de químicos tóxicos que pueden tener el efecto de un disruptor endócrino como por ejemplo, los presentes en envases plásticos, en fertilizantes y otros agroquímicos.
Sin embargo, comer limpio no está libre de desventajas, pues como dijimos, no es fácil de llevar a cabo ni mucho menos barato, ya que los alimentos orgánicos, ecológicos o elaborados sin ningún tipo de químicos son habitualmente los que mayor precio poseen.
De igual forma, no siempre es más nutritivo o más sano en términos nutricionales un alimento natural, pues como explicamos antes, siropes, miel e incluso un zumo de fruta natural hecho en casa es fuente de azúcares libres o añadidos que se recomienda reducir en el día a día.
Consejos para aplicar el clean eating
Si no pretendes aferrarte al clean eating en forma extrema sino poner en práctica su lado más positivo, los siguientes consejos pueden ayudarte a lograrlo:
- Realizar la compra en el mercado y dejar a un lado el supermercado, pues en el primero siempre encontraremos más frescos que en el segundo, donde abundan los productos con etiquetas con algún grado de procesamiento industrial.
- Cocinar y comer más en casa de manera de evitar la ingesta de ingredientes industriales o habitualmente usados en cadenas de comida rápida que pueden sumar malos nutrientes a la dieta.
- Escoger alimentos de temporada y de producción local para así obtener ingredientes frescos, estacionales y amigables con el medio ambiente debido a que reduciremos la huella de carbono al evitar el gran traslado que requieren los productos importados o trasladados desde un lugar más lejano.
- Hacerse amigo del congelador, ya que de esta forma podemos crear nuestros propios aliados al momento de resolver una comida en pocos minutos, sin necesidad de acudir a derivados de la industria. Por ejemplo, podemos blanquear brócoli, zanahorias y otros ingredientes de temporada y congelarlos para disponer de ellos meses después o para cocinar en poco tiempo.
Estos trucos y todo aquello que nos aleje de los ultraprocesados pero nos acerque a la comida real siempre puede ser de ayuda para sacar todo lo positivo que el clean eating o comer limpio tiene para ofrecer.
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