Casi desconocidas en nuestro país hasta hace no tantos años, las ollas de cocción lenta son un electrodoméstico cada vez más común en nuestras cocinas. Imprescindibles para amantes de los guisos y la cocina tradicional, sus ventajas van más allá del cuchareo y permiten preparar multitud de platos prácticamente sin esfuerzo. Tan solo hay que escoger el modelo más adecuado a nuestras necesidades y aprender a darle buen uso.
El cierto boom que despertó la irrupción de las Crock-Pot en España trajo consigo una oferta comercial de estas ollas al que se fueron sumando numerosas marcas, lanzando poco a poco nuevos diseños y mejorando las tecnologías. Hoy en día encontramos un catálogo de lo más variado de ollas de cocción lenta, con precios muy diferentes que pueden marear un poco al más novato en este tipo de cocina.
Si todavía no te has decidido a probar las bondades de la cocina a baja temperatura, necesitas renovar tu olla o quizá incluso estés pensando en adquirir un modelo extra, en esta guía repasamos las características generales de este aparato y te damos varios consejos para que elijas el que más te conviene.
Qué tener en cuenta antes de comprar una olla de cocción lenta
Lo primero es tener muy claro para qué sirven estas ollas. Resumiendo mucho, son aparatos eléctricos que calientan a baja temperatura para alargar la cocción y obtener sabores más intensos y texturas más tiernas. Permite cocinar con menos grasas, no hay que estar tan pendiente de la cocina y en algunos casos se pueden programar para que cocine sola durante la noche o mientras estamos trabajando o haciendo deporte.
También permite ahorrar energía, pues consumen muy poco, y en la lista de la compra, ya que se pueden obtener platos exquisitos con cortes de carne más baratos y duros, pues gelatiniza y ablanda las fibras. Y con una olla de cocción lenta se pueden hacer también masas de pan, yogur y fermentados, sopas, salsas, mermeladas, pescados al vapor, legumbres, etc.
Tamaño y capacidad
Es el primer factor a considerar, como en casi todos los aparatos de cocina. Si no tenemos sitio donde colocarla, mal empezamos. Para acostumbrarnos a usarla y que no termine olvidada en el trastero, la olla de cocción lenta se merece un hueco fijo en la cocina, y necesitamos cierto espacio para ello.
Además de tener en cuenta las medidas, su tamaño irá en función de la capacidad. Una olla grande nos dará más juego para cocinar alimentos voluminosos o tener raciones de más para envasar y congelar -es una función muy útil de estas ollas, gran aliada del batch cooking-. Pero si somos pocos en casa, un tamaño excesivo puede ser contraproducente cuando queramos hacer platos más de diario o raciones comedidas.
Cada fabricante suele indicar el número de raciones aproximado que rinde cada olla, pero se suele recomendar una capacidad de unos 5 litros como media genérica versátil para empezar. Hay que recordar que nunca se pueden llenar hasta arriba, así que hay que fijarse en la capacidad máxima útil.
Forma redonda u ovalada
Son los dos formatos básicos de estos aparatos. Casi todas son ovaladas, aunque cada vez más fabricantes optan por modelos redondos, aparentemente más compactos, y que suelen corresponder a tamaños más pequeños.
Una slow cooker ovalada permite cocinar alimentos alargados más grandes como aves enteras, solomillos, piernas de cordero, pescados completos, costillares o bizcochos tipo plumcake o panes alargados.
Materiales
La olla en sí misma donde se cocinan los alimentos puede ser de cerámica refractaria o metálica. Ambos materiales conducen bien el calor, aunque la cerámica tiende a hacerlo de manera más homogénea y también lo conserva mejor. Es un mejor material, además, para elaborar masas de panadería o dulces, y mucho más agradecido de usar dentro del horno.
La tapa puede ser totalmente opaca, de plástico o metálica, o bien de vidrio transparente. En este caso tendremos la posibilidad de ver el interior de la olla sin necesidad de abrirla, aunque a veces se empañe demasiado por la humedad generada. En general, son más agradecidas las tapas transparentes.
Generalmente las tapas son totalmente separables del cuerpo de la olla, pero algunos modelos, generalmente más pequeños, la tienen adherida mediante un mecanismo abatible; esto puede ser un poco incómodo para su manejo o limpieza, si bien evita tener que dejarla en otra superficie al abrirla. Depende un poco del gusto particular.
Olla extraíble o de una pieza
Enlazando con la funcionalidad de la tapa, podemos encontrar algunas ollas de cocción lenta que no se separan en los dos cuerpos básicos que la conforman. Es raro, pues el modelo más típico es el de olla extraíble de la base, pero conviene tenerlo en cuenta antes de comprar, ya que son más incómodas, especialmente de cara a su limpieza.
Niveles de cocción
Lo habitual es que estas ollas ofrezcan dos niveles de potencia o de cocción, con dos temperaturas básicas: baja y alta. Esto permite jugar un poco con los tiempos y ser más precisos en la cocción de alimentos más delicados o más duros.
Es lo mínimo que podemos pedir a este tipo de ollas y no son muy recomendables los posibles modelos muy básicos que solo presenten un nivel de potencia. Adicionalmente, ganarán puntos en versatilidad aquellas que ofrezcan un nivel más o la opción de precisar más la temperatura.
Posibilidad de programación
Puesto que una de sus grandes ventajas es la posibilidad de dejar la olla cocinando mientras nos dedicamos a otros menesteres, para tener la comida lista y caliente justo cuando lo necesitamos, los fabricantes apuestan cada vez más por ollas programables. Esto permite no solo fijar el tiempo de cocción, también cuándo queremos que arranque a cocinar.
Es un función muy práctica pero que se puede solventar fácilmente con un enchufe especial programador, en caso de que nuestra olla no cuente con ella.
Manual o digital
Las ollas de cocción lenta más tradicionales siguen el modelo básico algo vintage con modo de uso manual; es simple, sencillo, funcional y práctico. Pero como todo hoy en día, están siendo sustituidas por modelos más avanzados y modernos, con pantallas digitales y botones.
Una pantalla básica digital simple nos ayudará a controlar mejor el tiempo de cocción, ya que suele mostrarlo en una cuenta regresiva que podemos reajustar sobre la marcha. Con las ollas 100% manuales, es más complicado saber exactamente cuánto tiempo queda.
Accesorios y otras funcionalidades
Para distinguirse de la competencia -y animarnos a gastar un poco más-, las compañías están renovando el catálogo de ollas de cocción lenta sumando nuevas tecnologías y funcionalidades. Si bien no son necesarias en un aparato tan simple como este, sí pueden marcar la diferencia en nuestra elección, siempre que sean extras que vayan a resultarnos útiles.
Algo muy práctico es el accesorio de remover automáticamente; algunas ollas cuentan con uno o dos mecanismos intercambiables para que la olla remueva, ella sola, la comida periódicamente mientras guisa, logrando mejores resultados sobre todo en modelos más grandes. También destaca la función sellado, para dorar primero los alimentos sin necesidad de usar sartén, o el mantener caliente.
Modelos interesantes de ollas de cocción lenta que podemos encontrar en el mercado
Crock-Pot SCCPRC507B
El modelo más vendido en estos momentos de Amazon es uno de los clásicos de la marca que inició la locura por la slowcooking. Tiene una capacidad de 4,7 l y en su versión sin tapa abatible, pero de vidrio transparente, cuesta solo 49,00 euros.
Tiene temporizador digital programable hasta 20 horas con la tradicional cuenta atrás, dos potencias, mantiene la comida caliente cuando termina y está formada por las dos típicas piezas con la olla de cerámica extraíble.
Crock-Pot SCCPRC507B Olla de cocción lenta digital para preparara multitud de recetas, 230 W, 4.7 litros, Acero Inoxidable
Amazon Basics Olla de cocción lenta
El modelo básico de la marca propia de Amazon es todo lo que se puede esperar de él, siendo llamativo el brillante color rojo que luce el cuerpo metálico del aparato, recordando a uno de los viejos modelos de Crock-Pot más míticos. Por 38,13 euros tenemos una olla de tamaño medio de 3,5 litros, con dos niveles de potencia y funcionamiento manual.
Sencillísima de usar, cuenta también con la función mantener caliente y la siempre práctica tapa de vidrio templado transparente, en este caso totalmente extraíble. La cubeta es de cerámica y tiene pies de goma antideslizantes.
Amazon Basics – Olla de cocción lenta, con 3 niveles de calor y función de mantenimiento del calor, 135-160 W, 3,5 l
Cecotec Chup Chup Matic Digital
En la apuesta de la marca española Cecotec por estas ollas destaca el modelo digital de su Chup Chup, siguiendo el diseño tradicional, a un precio de 49,90 euros. Con forma ovalada y capacidad de 5,5 litros, la cubeta es cerámica y la tapa de vidrio transparente con su junta de silicona típica, abatible desde la base metálica del aparato.
Es programable hasta 24 horas, con temporizador de 20 horas, se apaga sola cuando termina la cocción y ofrece los típicos dos niveles de cocción en potencia alta y baja.
Cecotec Olla de cocción Lenta Chup Chup de 5,5 litros, cubeta cerámica con Forma Ovalada, Tapa de Cristal con Junta de Silicona y un Completo recetario. (Digital)
Russell Hobbs Compact Home
Con un diseño compacto en vertical, ofreciendo un cuerpo cerámico cilíndrico, este modelo es perfecto para cocinas pequeñas o familias reducidas, ocupando muy poco espacio. Tiene una capacidad de 2 litros y cuesta solo 30,99 euros.
Es una olla muy funcional, con su tapa de cristal templado transparente extraíble con colgador y un sencillo display manual con dos potencias de cocción y la función de mantener caliente una vez ha terminado.
Russell Hobbs Compact Home – Olla de Cocción Lenta Compacta (Olla Baja Temperatura, Acero Inox y Negro, 2l) -ref. 25570-56
Crock-Pot AutoStir CSC012X
En la gama media de Crock-Pot, a 78,29 euros, destaca este modelo con sistema AutoStir, un mecanismo que se acopla a la tapa de vidrio transparente y que permite conectar dos accesorios para que la olla remueva la comida a medida que cocina.
Tiene una capacidad de 5,7 litros, forma ovalada y tapa extraíble, con dos niveles de potencia y la función automática de mantener caliente. Para remover ofrece dos palas, una totalmente de plástico y otra metálica, para usar en alimentos más duros y sólidos o en guisos y estofados más melosos.
Crock-Pot CSC012X AutoStir – Olla de Cocción Lenta Digital para Todo Tipo de Recetas, 240 W, 5.7L, Acero Inoxidable, Gris Inox
Crock-Pot Duraceramic CSC027X
En un bonito color blanco con toques de gris piedra, el modelo más avanzado de la Crock-Pot Duraceramic destaca por aunar diferentes tipos de cocción además de la olla lenta programable. El cuerpo de la olla cerámica extraíble se puede usar directamente sobre fuego de gas, vitrocerámica, inducción o dentro del horno, de tal modo que permite saltear, freír o dorar primero los ingredientes antes de programar la cocción en la base. Cuesta 98 euros.
Esta serie tiene además un revestimiento especial interior de la marca, Duraceramic, que favorece una cocción más precisa y homogénea. Con capacidad de 6 litros, display digital y programable hasta 20 horas, por lo demás ofrece las tradicionales funciones de dos potencias y mantener caliente automáticamente.
Crock-Pot Duraceramic CSC027X Olla de cocción Lenta Digital, Recipiente Compatible con Fuego e inducción, para Preparar Todo Tipo de Recetas, 6 litros, Acero Inoxidable, Blanco
Russel Hoobs Sous Vide
Un interesante modelo avanzado e híbrido es esta olla de la británica Russel Hobbs, que aprovecha la cocción lenta a baja temperatura para conjugarla con la técnica sous vide y con control máximo de la temperatura. Para ello, cuenta con un display digital muy intuitivo, una sonda para controlar la temperatura, y separadores para los alimentos dentro de la cubeta, que es cerámica.
Cuesta 97,80 euros y por ese precio tenemos tres aparatos en uno, permitiendo cocinar en técnica sous vide durante 20 horas, con control de la temperatura hasta 99 horas 59 minutos, y en cocción lenta 20 horas, manteniendo la temperatura caliente hasta 4. Tiene una capacidad de 6,5 litros.
Russell Hobbs Sous Vide – Olla de cocción lenta (al vacío, recipiente cerámica, 6 raciones, digital, ref. 25630-56) Negro
Electrolux ESC7400
Con una notable capacidad de 6,8 litros apta para hasta ocho raciones, esta olla de cocción lenta de Electrolux destaca además por su gran pantalla digital y panel de mandos mediante botones de uso intuitivo. Cuesta 107,90 100,76 euros y cuenta con numerosas buenas valoraciones de usuarios.
Es una olla además con más funciones de las habituales, ya que suma un tercer nivel de potencia, ofreciendo baja, media y alta, con un modo especial para el cocinado de sopas, otro de buffet, más la opción de mantener caliente. La cubeta es de cerámica y la tapa extraíble de vidrio transparente.
Electrolux ESC7400 Olla de cocción lenta con display digital y 6,8 l de capacidad, 235 W, 6.8 litros, Gris
Crock-Pot CSC024X Multicook 5.6L
Crock-Pot CSC024 Olla de cocción lenta, 240 W, 5.6 litros, Acero Inoxidable, Gris
En los modelos más avanzados y con un precio superior finalizamos destacando una de las últimas novedades de Crock-Pot, que se apunta a la multicocción con cinco funciones por 169 euros. Aademás de la tradicional cocción lenta, esta slowcooker permite saltear, asar, cocer al vapor y hornear.
Con una cubeta rectangular con capacidad de 5,6 litros, tiene tapa de vidrio transparente extraíble, una rejilla para cocer al vapor o asar, y viene también con un vaso medidor. El funcionamiento es digital con una pantalla que controla las funciones y el tiempo restante, así como la programación o los ajustes personales.
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