Toda la zona. A medida que se flexibiliza el aislamiento social, preventivo y obligatorio se multiplican las situaciones de violencia que derivan en intervenciones policiales, muchas de las cuales terminan con forcejeos, intercambio de golpes y detenciones. Inclusive, durante la cuarentena terminaron dañados varios móviles de la Policía de la Provincia, luego de ser apedreados, apaleados y pateados.
Este fin de semana no fue la excepción. Este domingo, en B° Güemes, la fuerza de seguridad acudió en auxilio de una vecina que había discutido con su pareja y cuando intentaron entrevistar al hombre, él y tres jóvenes más agredieron a los uniformados con insultos y amenazas, primero, y arrojándoles elementos contundentes a ellos y los móviles, después.
Una camioneta de la Guardia de Infantería terminó con daños en el vidrio delantero y todos los participantes de la gresca fueron detenidos.
Durante la noche, a pocas cuadras del lugar donde fue este altercado, la Policía debió actuar ante un hecho infrecuente: en la calle Paso de los Andes, dos mujeres, de 55 y 43 años de edad, amenazaban a sus vecinos con cuchillos tipo serrucho. Ambas fueron detenidas.
Más accidentes con motos.
Otros hechos que se repiten, casi a diario, son los accidentes de tránsitos con motociclistas involucrados.
El Día de la Bandera, en horas de la tarde, los policías de esta ciudad debieron auxiliar a un hombre de 42 años que perdió el control de su motocicleta en el Camino Real, resultando con traumatismos leves en miembros superiores.
El mismo día, a la noche, en B° Sierras y Parque, otro motociclista, de 33 años, chocó con una camioneta Ford Eco Sport. Traumatismo en tobillo izquierdo fue el diagnóstico de la médica de guardia que lo atendió en el Hospital Regional Vicente Agüero.
Herida de arma de fuego.
En el Hospital también atendieron a un hombre de 35 años a quien hirió, de manera accidental, su empleada doméstica.
El hecho ocurrió en Villa Gutiérrez. Al parecer, la mujer limpiaba un ropero y se le cayó una bolsa que contenía un revolver calibre 22, que se disparó de forma accidental e hirió a su empleador en la pierna derecha, a la altura del muslo.
La herida tenía orificio de entrada, pero el proyectil había quedado alojado en el músculo.
22-06-2020