La
Secretaría
de
Salud
Mental
del
Ministerio
de
Salud
recuerda
a
aquellas
personas
que
aún
no
presentaron
la
documentación
para
obtener
la
matrícula
de
acompañante
terapéutico,
que
pueden
hacerlo
hasta
el
día
7
de
julio
de
este
año.
Se
debe
subir
a
la
plataforma
CIDI
(en
el
portal
“E-trámite”):
-
DNI
(ambos
lados). -
Certificación
de
formación
en
Acompañante
Terapéutico. -
Certificación
laboral
que
acredite
el
ejercicio
de
la
profesión
AT
(monotributo/contrato
laboral). -
Constancia
del
equipo
tratante
y
familiar
y/o
persona
a
cargo.
Esa
información
debe
estar
escaneada
y
en
archivo
PDF.
Cabe
destacar
que
es
requisito
contar
con
CIDI
nivel
2
y
datos
personales
actualizados.
Por
consultas
y
para
obtener
más
información,
la
Secretaría
cuenta
con
el
mail: reglamentacionat@gmail.com.
Marco
legal
de
la
profesión
El
Ministerio
de
Salud
es
la
autoridad
de
aplicación
de
la
ley
10.393
de
Acompañantes
Terapéuticos,
y
su
reglamentación,
siendo
en
consecuencia
quien
otorga
la
matrícula
profesional
a
fin
de
dar
un
marco
de
legalidad
al
ejercicio
de
la
profesión;
hasta
tanto
se
cuente
con
una
entidad
deontológica
propia.
La
reglamentación
prevé
que
la
cartera
sanitaria
debe
realizar
un
llamado
de
presentación
de
antecedentes
–por
única
vez
y
por
el
plazo
de
cuatro
meses-
para
todos
los
postulantes
(con
formación
suficiente,
idóneos
o
quienes
aún
capacitados
no
certifiquen
formación
suficiente).
En
función
de
tal
acreditación,
y
en
relación
con
lo
dispuesto
en
la
reglamentación,
algunos
deberán
realizar
un
examen
único
de
acreditación
y
los
demás
un
curso
de
nivelación
previo,
el
cual
se
dictará
por
única
vez
(con
posterioridad
al
llamado)
para
poder
acceder
a
la
instancia
del
examen
referido
supra.
Sobre
la
profesión
Los
acompañantes
terapéuticos
son
agentes
de
salud
con
formación
teórico-práctica
de
nivel
superior,
cuya
función
es
brindar
atención
personalizada
tanto
al
paciente
como
a
su
familia
en
la
cotidianeidad,
con
el
fin
de
colaborar
en
la
recuperación
de
su
salud,
en
su
calidad
de
vida
y
en
su
reinserción
social
dentro
de
un
marco
interdisciplinario,
bajo
la
supervisión
y
coordinación
de
los
profesionales
tratantes
del
paciente.
Son
actores
esenciales
en
los
procesos
terapéuticos,
rehabilitación
y
reinserción
social
de
las
personas
con
discapacidad,
problemáticas
de
salud
mental,
adicciones
y
tercera
edad
y
para
sus
familias.