En el mundo hay -principalmente- dos tipos de bebés: los que aman viajar en el coche e incluso se duermen casi en cuanto arrancamos, y los que detestan con el alma entera ir sentados en esa silla y se encargan de demostrarlo llorando a todo pulmón.
Si tu hijo es de los primeros, los viajes en coche son cosa sencilla. Pero si en casa tienes un bebé que llora al ir en la silla del coche, has vivido en carne propia una experiencia que puede ser muy estresante.
Así que con la intención de ayudar a solucionar esos momentos, te comparto nueve consejos para cuando tu bebé llora en la silla del coche.
Paciencia
Suena lógico u obvio, pero el primer consejo que voy a darte es este: sé paciente. Aunque para ti sea lo más lógico y seguro colocarle en su sillita cada vez que viajen o se trasladen en coche, para tu bebé puede ser una experiencia muy extraña.
Así que deberás ser paciente: tanto para esperar a que poco a poco se adapte, como para resistirte a sacarlo al primer llanto. Esto segundo es importante, porque si lo sacamos en cuanto comience a llorar impedimos que se acostumbre a la silla y podemos poner en riesgo su seguridad.
Permite que se familiarice con su silla
Bebés y niños son curiosos por naturaleza, y les gusta estudiar, observar y analizar todo aquello que es nuevo en sus vidas. Así que una forma de ayudarle a familiarizarse con los viajes en coche, es mostrándole primero la sillita.
Permítele que la conozca, dejando la silla a su alcance en casa (siempre con supervisión, claro) y dándole permiso de jugar con ella, sentarse y conocerla a fondo para que se convierta en un objeto cotidiano.
Comienza realizando viajes cortos
Todo proceso de adaptación comienza con baby steps o pasos chiquitos, así que lo mismo podemos esperar de este proceso para ayudar a nuestro bebé a familiarizarse con su silla y los viajes en coche.
Comienza realizando trayectos cortos: una salida rápida al mercado, visitas a amigos o familia que vivan cerca, o incluso puedes hacer viajes de simulación en los que se suban al coche y solo de un par de vueltas para que poco a poco se acostumbre.
Verifica que vaya cómodo
Teniendo un bebé habremos de ser conscientes de algo: su principal forma de comunicarnos que están incómodos es el llanto. Así que antes de realizar cualquier viaje (o incluso si ya vamos a medio camino), habremos de revisar todo para asegurarnos que vaya cómodo.
Detalles que quizás no parecen importantes pueden ser el origen de su molestia y consecuente llanto: si tiene calor, si alguna prenda quedó arrugada o mal puesta, si el sol le molesta, si el arnés está demasiado justo, entre otras cosas.
Apóyate con juguetes
Una forma de ayudar a calmar a un bebé que llora, además de verificar que se encuentra bien y no le falta nada, es entregándole un muñeco suave que ayude a confortarle. Cuando viajamos en coche, podemos replicar este mismo truco.
En este caso tenemos dos opciones: recurrir a algún objeto o muñeco que él ya conozca y le aporte calma, o bien, tener un surtido de juguetes especiales para los viajes en coche. Recuerda que en cualquier caso, deberán ser siempre juguetes y objetos suaves.
Coloca un espejo
Este consejo es ideal para los bebés que ya están un poco mayorcitos (no funcionaría para un recién nacido, por ejemplo), ya que al poder observarnos mediante un espejo pueden sentirse más tranquilos. Hay muchos modelos de los que podemos elegir y algunos hasta tiene luz y sonidos para calmar al bebé.
Amzdeal Espejo Retrovisor de Coche para Bebé – Espejo para Asientos Traseros para Vigilar el Bebé, 360°Ajustable & Perfecta Imagen, 100% Inastillable, Fácil Instalación y Buena Sistema de Sujeción
Pon música
La música adecuada puede ayudarnos a lograr que el bebé se tranquilice o relaje. Como padres solemos recurrir a ella para la hora de la siesta o el momento de dormir al bebé, pero también podemos usarla para ayudar a calmarle en los viajes en coche.
Hay diversas opciones a las que podemos recurrir, como ponerle canciones infantiles que él ya conozca y le pongan alegre, o aquellas canciones relajantes, como melodías instrumentales y nanas que le ayudarán a tranquilizarse .
Evita conducir de forma brusca
¿Recuerdas esa sensación al estar sobre una montaña rusa en un parque de diversiones? Muchas se mueven demasiado rápido, lo que aumenta nuestra adrenalina y nos pone nerviosos.
Ahora imagina lo que podría sentir un bebé, que no está acostumbrado a viajar en coche, si te trasladas de forma acelerada y cambiando bruscamente de velocidad.
Procura conducir siempre de forma suave y a una velocidad constante, evitando los acelerones y cuidando los giros, así como anticipando y teniendo precaución ante los posibles cambios que puedan presentarse en el camino.
Trata de viajar siempre acompañado
Finalmente, uno de los consejos más efectivos: si es posible, viaja acompañado de alguien más además de ti y tu bebé. Así, la otra persona (o tú) puede sentarse en el asiento trasero y hablarle, tomarle la mano o acariciarle para ayudar a calmarle.
Fotos | iStock
En Bebés y más | Cómo entretener a los niños durante los viajes en coche: 15 canciones, juegos y actividades
