Adara, mujer precabida, ha sabido desmarcarse de Gianmarco Onestini antes de que el italiano estrenara ‘Maracaná’, un horripilante y grotesco desprecio a la música que ha hecho de la canción de Ylenia una de Mocedades. Quizás por eso ha vuelto hasta GH17 para recuperar a Rodrigo Fuertes.
Como olvidar esa edición de GH en la que Adara pronunció su siempre vigente »sin vergüenza, mala persona, me has hecho sufrir mucho», icónico nivel »por qué no te callas», de Juan Carlos I. Parece que Adara tampoco la ha olvidado, y ha rescatado al primer hombre que llamó su atención en el concurso, Rodri.
Adara "sinverguenza … despues decias que estaba loca … a Miguel#ghdirecto pic.twitter.com/BpZC79uNsD
— mary (@maryvarelaGH) October 17, 2016
Se atraían, pero sus caminos se separaron después de que Adara optara por Pol Badía, uno que llegó disfrazado de luchador mexicano del Pressing Catch y que ha acabado siendo el ex novio del Maestro del photoshop y de la lectura de culos, Joao.
Rodri se decantó por Bea, un copia y pega de la que ganó un Gran Hermano anterior (Paula) solo que cambiando la »piña bebé» por un descafeinado »naranjita la lía». Ellos formaron el shippeo de los chonijos, aportando Rodrigo la parte de ‘pijo’ a lo de ‘choni’, por la pelirrosa Bea. Luego, hicieron un reality web para sus padres a la hora de comer y, quizás, para alguien más: Rodea.
De hecho, Rodri ya le dijo a Adara que igual acababan juntos después del programa, y ella, en otro momento, confesó empezar con su novio en la casa para darle celos a Rodrigo. Sí, yo también he visto capítulos de los Shin Chan con comportamientos más maduros, pero así sucedió y así os lo cuento.
Ahora Adara y Rodrigo han retomado ese punto y aparte consolidado en una cena con familiares y amigos entre los que se encontraba Marc, el príncipe encantador de Shrek con camisa verde y recién graduado en Derecho y ADE, que defendía a Rodri en plató.
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La noticia Madre mía, madre mía, Rodrigo Fuertes es el nuevo amor de Adara Molinero tras el ‘Maraca No’ de Gianmarco fue publicada originalmente en Poprosa por Darío del Alcázar .
