Apenas un día después que Hyundai, Kia ha presentado también su nueva estrategia, la cual recoge el objetivo de contar con una gama de 14 modelos eléctricos para 2027.
Éste es uno de los objetivos que, según su CEO Ho Sung Song, tratarán de alcanzar en los próximos ocho años. Entre ellos también figura el de llegar a vender 1,2 millones de vehículos eléctricos en 2030.
Para lograr esto último Kia tiene previsto conceder un mayor poder a sus sedes continentales, las cuales tendrán la misión de producir y ofrecer modelos ad-hoc para cada mercado en cuestión, tal y como ya ha sucedido con el lanzamiento del Sportage.
Por ejemplo, en Europa comenzarán en 2025 con urbanos y compactos, mientras que en Norteamérica empezarán en 2024 con propuestas de SUV medios y pick-ups.
La tecnología como pilar principal
Precisamente, los vehículos con vocación recreacional tendrán buena parte del protagonismo. Uno de ellos será el EV9, el SUV grande que desvelaron como concepto en el último Salón de los Ángeles y que verá la luz en 2023.
Este modelo se convertirá en el próximo buque insignia de Kia, introduciendo servicios conectados como las actualizaciones ‘over the air’ y la adquisición de funcionalidades bajo demanda.
Asimismo, será el primero en recibir el AutoMode, la nueva tecnología que la marca está desarrollando para implementar en sus coches el nivel 3 de conducción autónoma. Se trata de una suite que incorpora lo que denominan ‘Highway Driving Pilot’, un asistente capaz de autodirigir el coche en autopista sin la intervención del conductor.
Por tanto, esta tecnología se une a las similares que ya poseen y utilizan marcas como Honda o Mercedes-Benz. Eso sí, antes de poder desplegarla en las carreteras, Kia tendrá que demostrar su conformidad con las normativas vigentes (como la UNECE R-157) y obtener el beneplácito de las autoridades, empezando por el gobierno surcoreano.
El AutoMode se implementará en el resto de la gama Kia entre 2023 y 2026, manteniéndose en actualización constante a la guisa de lo que Tesla hace con su Autopilot.
Todo lo anterior tendrá mucho que ver en otro de los planes de Kia: acceder al mercado de los vehículos de propósito específico. Una incipiente línea de negocio donde la marca quiere ofrecer soluciones y servicios personalizados para cada cliente, desde taxis autónomos hasta vehículos de reparto de último kilómetro. La primera de estas propuestas será presentada en 2025.
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