A partir del próximo lunes 22 de junio, los funcionarios de la Administración General del Estado podrán acogerse a la «modalidad no presencial», término con que se recoge el teletrabajo en el acuerdo firmado entre sindicatos y Gobierno.
Según esta resolución, podrán teletrabajar hasta cuatro de los cinco días de la semana quienes pertenezcan a colectivos vulnerables al coronavirus, tengan hijos menores de 14 años o estén al cuidado de personas dependientes o con discapacidad.
El resto del personal podrá trabajar de manera «no presencial» al menos un día de la semana. Como se señala desde el Gobierno, se trata de una medida que ayuda a la conciliación familiar y laboral.
Acuerdo válido hasta el fin de la crisis sanitaria por el Covid-19
La ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, y los representantes sindicales de CSIF, UGT y CIG, han suscrito por vía electrónica el acuerdo sobre las medidas para adecuar el funcionamiento de la Administración General del Estado (AGE) y la reincorporación de su personal en la etapa de la nueva normalidad y que se recogen en una nueva Resolución del Secretario de Estado de Política Territorial y Función Pública.
Según este acuerdo los aproximadamente 200.000 hombres y mujeres que trabajan en la AGE (en las oficinas de los ministerios, la Seguridad Social, la Agencia Tributaria, la Policía, la DGT…) podrán trabajar desde casa si así lo desean, hasta cuatro días semanales de los cinco laborables, en caso de tener hijos menores de 14 años, estar al cuidado de personas dependientes o con discapacidad o pertenecer a un grupo de riesgo vulnerable al Covid-19.
Aunque la resolución refleja la tendencia generalizada al trabajo no presencial en la Administración, el teletrabajo será algo voluntario y los días dependerán del acuerdo al que lleguen la empresa y el trabajador: el máximo serán cuatro, pero podrán ser uno, dos o tres, o incluso ninguno.
El resto de los funcionarios, que no pertenezcan a los colectivos prioritarios, podrán teletrabajar por lo menos un día, lo que abre la posibilidad de aumentar los días si llegan a un acuerdo con la empresa.
La norma es que «hasta un 20% de la jornada semanal será presencial» para los colectivos priorizables y que «un mínimo del 20% de la jornada semanal» será presencial para el resto del personal.
La modalidad de teletrabajo es voluntaria y reversible, por lo que el trabajador podrá volver a la fórmula presencial si lo desea o si las «necesidades del servicio» lo requieren.
En el caso de que ambos progenitores o responsables sean empleadas o empleados públicos en activo, no podrán disfrutar de esta medida de forma coincidente.
Ante esta nueva realidad, se priorizará la atención al público vía telemática y telefónica, por lo que será necesario tener cita previa para las gestiones presenciales, que contarán con limitación de aforo y se adoptarán las medidas necesarias para minimizar los posibles riesgos para la salud. La Resolución contempla la opción de que algunos centros administrativos amplíen su horario hasta las 21.00 horas.
Desde Moncloa se señala que «esta modalidad es una mejora de la conciliación del desarrollo profesional con la vida personal y familiar, y el respeto en todo caso de los principios de igualdad y la corresponsabilidad». El personal en modalidad no presencial tendrá los mismos derechos y deberes que el resto del personal en modalidad presencial.
Vía | Ministerio de Política Territorial y Función Pública
Fotos | iStock
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