A la hora de hablar del rock en Latinoamérica, hay un nombre que sin duda es indispensable para entender su historia y que marcó un antes y después en este género: Soda Stereo. Lo que Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charli Alberti lograron durante 15 años de carrera fue impresionante, influenciaron a miles de jóvenes desde México hasta Argentina y lo mejor de todo es que nos dejaron un montón de canciones espectaculares.
Podemos nombrar varias rolas que marcaron su carrera, “Nada Personal”, “Cuando pase el temblor”, “Persiana Americana”, “En la ciudad de la furia”, “Zoom” y muchas más. Sin embargo, hay un tema que marcó a la banda y sobre todo la vida de Cerati, “Té para tres”, una de las canciones más cortas que incluyeron en toda su discografía y que tiene el que quizá sea el mensaje más emotivo e íntimo que el líder de la banda escribió en su carrera.
A la hora de hablar del rock en Latinoamérica, hay un nombre que sin duda es indispensable para entender su historia y que marcó un antes y después en este género: Soda Stereo. Lo que Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charli Alberti lograron durante 15 años de carrera fue impresionante, influenciaron a miles de jóvenes desde México hasta Argentina y lo mejor de todo es que nos dejaron un montón de canciones espectaculares.
Podemos nombrar varias rolas que marcaron su carrera, “Nada Personal”, “Cuando pase el temblor”, “Persiana Americana”, “En la ciudad de la furia”, “Zoom” y muchas más. Sin embargo, hay un tema que marcó a la banda y sobre todo la vida de Cerati, “Té para tres”, una de las canciones más cortas que incluyeron en toda su discografía y que tiene el que quizá sea el mensaje más emotivo e íntimo que el líder de la banda escribió en su carrera.
Meses antes de que Soda Stereo estrenara su quinto álbum de estudio, el padre de Gustavo Cerati fue al hospital a hacerse unas pruebas, pues le habían detectado un posible tumor maligno. Todos mantenían las esperanzas de que esto fuera un diagnóstico incorrecto, y el líder de la banda así como su madre esperaban que la situación mejorara para él, pero sus ilusiones se vinieron abajo una triste tarde lluviosa.
Lilian Clark había preparado té para tres personas, su marido, su hijo y ella. Gustavo estaba en casa y ambos esperaron a que Juan José regresara con los resultados de los estudios para darles buenas noticias, aunque no contaban con lo que estaba por decirles cambiaría por completo sus vidas. De acuerdo con la propia madre de Cerati, aquella tarde el patriarca se sentó con ellos y puso los análisis en la mesa.
Pero en ese momento les comunicó a toda la familia Cerati lo que nadie quería escuchar, Juan José padecía un cáncer terminal, le quedaba poco tiempo de vida y lamentablemente no había nada que pudieran hacer. Gustavo tomó un poco de té sin saber cómo actuar, padre e hijo se mantuvieron fríos, pues ninguno de los dos demostraban abiertamente sus sentimientos, tanto así que en un momento como el que estaba pasando no dijeron nada.
Sin embargo, Lilian no pudo ocultar sus lágrimas ante esta noticia tan triste. Gustavo Cerati observaba a lo lejos como su madre se levantaba llorando para abrazar a su marido, pero en ese momento sintió un dolor profundo con la imagen que estaba presenciando– con la mujer que le dio la vida sollozando y casi despidiéndose de su padre– que se quedó en su mente y decidió canalizar sus sentimiento de la única forma que sabía: con música.
Fuente: Sopitas