El
lunes
cerró
sus
puertas
La
Proveeduría
en
Colonia
Caroya
y
en
estos
días
llegaron
los
telegramas
de
despido
a
los
pocos
trabajadores
que
quedaban
en
la
sucursal.
La
Asociación
Mutual
Única
de
Trabajadores
de
Edificios
de
Rentas
y
Propiedad
Horizontal
de
la
República
Argentina
apareció
en
mayo
del
2019
con
una
propuesta
de
administrar
los
supermercados
de
la
familia
D´olivo,
que
trabajaban
bajo
el
nombre
de
Super
Uno.
En
enero
del
2022
hubo
seis
despidos
y
la
situación
volvió
a
generar
tensión.
Ya
en
ese
entonces
se
hablaba
de
bajas
ventas
y
una
reestructuración
que
incluía
reducir
el
personal.
Esta
semana
se
dio
el
cierre
definitivo,
pero
con
una
salvedad:
la
sucursal
de
Jesús
María
seguirá
trabajando
normalmente
y
algunos
de
los
trabajadores
que
estaban
en
la
Colonia
habrían
pasado
a
la
de
la
calle
Almirante
Brown.
El
gremio
que
agrupa
a
los
empleados
es
la
Unión
Trabajadores
de
Entidades
Deportivas
y
Civiles
(UTEDYC)
Seccional
Córdoba
Norte,
que
pidió
al
Ministerio
de
Trabajo
que
intervenga
para
esclarecer
las
condiciones
de
esta
situación
y
que
haya
una
garantía
del
pago
de
las
indemnizaciones.
Mario
Pérez,
Secretario
General
del
gremio,
se
mostró
sorprendido
por
el
cierre: «hay
mutuales
que
tienen
supermercados
y
les
va
muy
bien.
Acá
puede
haber
alguna
mala
administración»,
dijo.
No
quiso
aseverar
si
la
comunidad
caroyense
castigó
al
local
por
lo
ocurrido
hace
más
de
cinco
años
y
prefirió
comprar
en
otros
mercados
locales.