Los polvos de sol o polvos bronceadores se vuelven en los mejores aliados durante el verano, de hecho, muchas de nosotras, una vez que vamos cogiendo tono en la piel, únicamente aplicamos este tipo de productos, dejando un poco más de lado (o solo aplicándolos en ocasiones más puntuales), las bases de maquillaje y demás.
Por ello, es básico saber aplicar bien en nuestro rostro los polvos porque será una forma de lucirlos estupendamente y además conseguir diferentes looks según la ocasión.
El stripping para las mejillas tocadas por el sol
Personalmente es la técnica que más uso con los polvos de sol. Y es que es una forma de sacarles mucho partido ya que aporta un ligero tono a la piel, sin abusar demasiado.
Como ya todas sabéis a estas alturas, el Stripping consiste en aplicar los polvos en lo que serían las zonas altas del rostro, en pómulos, puente de la nariz y frente. Es decir, en aquellas zonas en las que más incide el sol, consiguiendo ese efecto, precisamente, de piel besada por el sol.
En forma de W
Fue Guerlain el que nos enseñó esta técnica de aplicar los polvos bronceadores en forma de W. Concretamente, con sus Terracottas Light, los cuales tenían un tono rosado también con el que conseguir grandísimos resultados.
Estos Terracottas estaban destinados a dar ese efecto buena cara que era genial y que podemos conseguir con muchos otros productos. En cuanto a la técnica consistía en dibujar una “W” con la brocha sobre el rotro: empezando en la sien, a la altura del ojo, y dibujando una curva descendente por debajo del pómulo, subiendo hasta el entrecejo y repitiendo en el otro lado del rostro, difuminando el trazado.
El resultado es súper natural y queda precioso y es una forma más de utilizar unos polvos de sol creando un look diferente.
Contouring con polvos de sol
Ya sabéis que nosotras no somos muy fans de los maquillajes más recargados, del contouring muy marcado ni nada por el estilo. Sin embargo, para ocasiones especiales, macar las facciones ligeramente es un acierto.
Por ello, siempre os recomendaremos hacerlo con polvos de sol ya que es una forma mucho más natural de hacerlo y con resultados muy buenos. Así, los aplicaremos creando el famoso 3 sobre el rostro, comenzando en sienes, siguiendo por dejado de las mejillas y terminar en la zona baja de la mandíbula.
El resultado es un marcado de facciones sutil y estiloso al que podemos sacar gran partido este verano.
Polvos de sol por todo el rostro
Aunque pensemos que esta técnica ya no se lleva, por eso de que es la más básica y anticuada, en verano con el tono bronceado de la piel, es una forma de intensificarlo (sin pasarnos, por supuesto) y de sacar muy buen partido a nuestros polvos de sol.
Así, lo ideal es aplicarlo de forma sutil creando círculos por frente, zona alta de las mejillas, y continuar por mandíbula y barbilla, creando un efecto bronceado más uniforme, pero insistiendo más en la zona alta del rostro que, al fin y al cabo es donde incidiría más el sol
En todo caso, no hay que abusar demasiado porque podremos acabar consiguiendo el efecto contrario, en lugar de realzar el bronceado, subiremos de tono y el look desmerecerá.
Ahora ya solo tenéis que elegir el que se adapte mejor a vuestro estilo y a la ocasión, por supuesto.
Fotos | @collagevintage, @kendalljenner, @manuelemameli, @guerlain y @taylorlashae