Una
de
las
grandes
brechas
en
innovación
en
un
smartphone
pasa
por
la
fotografía
pero,
mientras
que
las
cámaras
de
toda
la
vida
han
sabido
coger
lo
mejor
de
la
tecnología
para
depurar
los
resultados,
con
la
fotografía
móvil
ya
tal.
De
hecho,
tal
y
como
reflexionaba
mi
compañero
Ricardo
Aguilar:
los
móviles
deberían
aprender
del
procesamiento
de
las
cámaras.
Porque
a
día
de
hoy
la
IA
y
el
procesamiento
a
veces
hace
maravillas
y
otras,
estragos.
El
problema
radica
no
tanto
en
los
componentes
de
los
teléfonos
(suelo
usar
móviles
de
gama
alta,
así
que
sobre
el
papel
tienen
lo
mejor),
sino
en
el
software:
cuesta
lograr
una
fotografía
hecha
con
el
móvil
de
calidad
y
realista.
Bajo
el
pretexto
de
acabar
con
el
ruido
y
subir
el
contraste,
vemos
fotos
que
al
hacer
zoom
descubres
el
desastre
en
forma
de
efecto
acuarela.
La
culpa
la
tiene
el
procesado
excesivo
y
malo.
Pieles
con
colores
que
no
existen
en
la
vida
real,
amarillos
demasiado
chillones,
contornos
ultramarcados…
esto
lo
veo
en
móviles
baratos,
pero
también
en
la
gama
alta.
Y
en
el
caso
de
los
buques
insignia,
no
es
tanto
de
la
calidad
de
la
lente
y
sí
del
procesado.
Sí,
hay
fabricantes
que
ofrecen
modos
profesionales
o
el
formato
RAW
para
que
puedas
regular
tú
los
parámetros,
pero
si
entra
el
software
a
manipular
la
foto,
malo.
Así
que
he
probado
una
app
de
cámara
sencillísima
que
dispara
a
pelo.
Zerocam:
fotografía
sin
artificios
Frente
a
esa
tendencia
a
demostrar
músculo
en
innovación
en
fotografía
mediante
software,
Zerocam
(disponible
gratis
en
Google
Play
Store)
ofrece
justo
lo
contrario
y
además
no
puede
ser
más
sencilla:
asegura
tomar
la
foto
con
el
sensor
sin
llevar
a
cabo
ni
procesado
ni
inteligencia
artificial.
Vamos,
que
la
imagen
que
captura
está
sin
artificios.
Ojo,
esto
implica
no
valerse
tampoco
del
HDR.

Izquierda:
Cámara
de
Google
Pixel.
Derecha:
Zerocam
Como
puedes
ver
en
la
comparativa
de
fotos
con
las
que
he
ido
ilustrando
el
artículo,
se
consiguen
resultados
mucho
más
planos,
sin
saturación
ni
colores
que
sobresalgan.
En
definitiva,
una
foto
mucho
más
natural
para
lo
bueno
y
lo
malo.
En
este
artículo
lo
he
comparado
con
la
cámara
de
los
Google
Pixel,
uno
de
los
software
que
en
mi
opinión,
tiene
un
procesado
más
acertado
y
aún
así,
Zerocam
merece
la
pena
en
diferentes
escenarios.
Pero
tengo
que
decir
que
en
general,
me
satisface
mucho
más
el
resultado
con
Zerocam
y
retocar
después.
Como
además
se
guardan
en
RAW,
es
ideal
si
lo
que
interesa
es
meter
mano
después
con
un
programa
de
edición
fotográfica.
Por
cierto,
algo
que
he
observado
es
que
las
fotos
hechas
con
Zerocam
pesan
más
que
las
fotos
estándar.

Izquierda:
Cámara
de
Google
Pixel.
Derecha:
Zerocam
Zerocam
es
simplicidad
por
los
cuatro
costados:
no
solo
fotografía
sin
añadidos,
sino
que
su
interfaz
no
requiere
de
explicaciones:
la
imagen
a
fotografiar
en
el
centro,
un
gran
botón
ovalado
amarillo
para
disparar
y
un
1x
que
permite
cambiar
los
aumentos
entre
1x
y
2x.
En
la
esquina
superior
derecha
vemos
además
un
contador
cuántas
fotos
nos
quedan
para
realizar
gratis
por
hoy.
Puedes
ver
un
pantallazo
de
la
interfaz
en
la
foto
de
la
portada
de
este
artículo.
Porque
Zerocam
es
de
pago:
1,99
euros
al
mes
o
10,99
euros
al
año,
si
bien
disponemos
de
cinco
fotografías
gratis
al
día.
Habida
cuenta
que
no
hay
almacenamiento
en
la
nube,
ni
procesamientos
o
funciones
extra
al
pasar
por
caja,
la
gran
ventaja
de
pagar
es
poder
fotografíar
sin
pensar
demasiado
(como
hacemos
ahora
con
el
móvil,
pero
no
antes,
cuando
dependíamos
del
carrete),
si
bien
usándolo
gratis
puede
ser
suficiente
para
probar
o
para
proyectos
puntuales
no
demasiado
complejos.
Portada
|
Eva
Rodríguez
de
Luis
En
Xataka
Android
|
Buscaba
una
app
gratis
de
galería
de
fotos
sencilla
y
encontré
esta
joya.
Me
ha
gustado
tanto
que
ya
no
uso
Google
Fotos
Vía
|
El
Español