Espirales de calabacín con vinagreta de sésamo: receta ligera, fácil y rápida

0
337

Lavar y secar bien los calabacines. Sacar los tallarines usando un espiralizador, una mandolina, un cortador manual o un pelador con dientes. Con estos últimos métodos habrá que ir girando el calabacín para sacar las tiras antes de llegar al corazón, más duro y con semillas, que podemos reservar para una crema o sopa.

Disponer en un colador, echar una buena pizca de sal y remover. Dejar que escurra un poco el agua durante unos 15 minutos. Mientras, preparar la salsa batiendo en un cuenco todos los ingredientes. Probar y ajustar las cantidades al gusto.

Laminar muy finos los ajos y dorarlos en una sartén con un poco de aceite de oliva, vigilando que no se quemen. Si usamos sésamo crudo, tostarlo también (1-2 cucharaditas). Escurrir bien el calabacín, pero con suavidad, y echar a la sartén.

Salpimentar y dar unas vueltas ligeras. Añadir una parte de la salsa vinagreta y saltear a fuego vivo durante unos 2-3 minuto, o un poco más si se prefiere una textura más tierna. Servir con el resto de la salsa, queso recién rallado y más sésamo.

Espirales de Calabacin. Pasos

Espirales de Calabacin. Pasos

Con qué acompañar las espirales de calabacín

Este plato de espirales de calabacín con vinagreta de sésamo es perfecto para una cena o almuerzo sencillo para una sola persona, saciante pero muy ligero. Podemos añadir proteínas con un huevo escalfado, o enriquecerlo con frutos secos. También podemos compartirlo en más raciones a modo de guarnición o primer plato.