En la vida se presentan situaciones en las que nos equivocamos y es importante pedir perdón por lo que hemos hecho de forma incorrecta. Estas experiencias no suelen ser fáciles o agradables pero son necesarias para nuestro crecimiento y aprendizaje.
En el caso de los niños, aprender a pedir perdón no depende solamente de una habilidad social que ellos deban desarrollar. Ten en cuenta que tu hijo aprende más de lo que ve de lo que le puedes decir.
El ejemplo es fundamental para que nuestros niños aprendan y crezcan como personas formadas en valores, que respeten a los demás. Pero, ¿cómo les enseñamos a nuestros hijos a pedir perdón? ¿Qué beneficios tiene hacerlo?
“Cuando digas la palabra ‘lo siento’, asegúrate de comprender que una disculpa tiene 3 partes. “Lo siento”, “Es mi culpa y no lo volveré a hacer” y “¿Cómo puedo mejorar las cosas?”. La última parte es la más importante”.
-Manasa Rao Saarloos-
¿Qué aprende un niño al pedir perdón?
Pedir perdón no solamente ayuda a subsanar las relaciones con otras personas, sino que, además, es una oportunidad valiosa para que tu hijo aprenda a reconocer cuándo se ha equivocado, y que no siempre tendrá la razón o estará en lo correcto.
Además, puede comprender que equivocarse está bien, que es parte del crecimiento de vida y que no hay nada de malo en ello, al mismo tiempo que aprende a hacerse responsable de lo que dice y hace.
Tomar consciencia de las consecuencias de los actos
Otro punto crucial de aprender a pedir perdón, es que el niño toma conciencia de que sus actos tienen consecuencias (positivas o negativas), y a su vez, esto le permite ser más empático y respetuoso con los demás al reconocer que ha herido de alguna manera a otra persona. Lo bueno es que puede intentar solucionarlo.
Cambiar algunos comportamientos
Aprender a pedir perdón también le ayudará a tu hijo a reconocer cuándo existen comportamientos dañinos, y esta toma de conciencia le permitirá cambiar para que no se repitan.
Adicionalmente, podrá desarrollar habilidades cognitivas al aprender a resolver las situaciones conflictivas.
Desarrollar ciertas habilidades
Además, sabemos que el desarrollo del proceso de aprender a pedir perdón está íntimamente relacionado con el desarrollo de muchas habilidades no solo cognitivas, sino también sociales, como lo indican los autores Díaz y Prieto en un artículo (2020).
Como ves, son muchas las ventajas de enseñar a un niño a pedir perdón. Ahora bien, ¿cómo le acompañamos en este proceso?
Enseñar a pedir perdón sin obligar
Es importante que el perdón sea sincero, y para esto es fundamental que no se trate de algo forzado. Puede ser frustrante para los adultos querer que un niño se disculpe y que no lo haga, pero recuerda que no debes forzar que esto ocurra.
Ofrécele información
Lo mejor que puedes hacer en estos casos es ofrecerle al niño información sobre lo que pasa.
En ocasiones, no son conscientes de que han sido groseros, por ejemplo, o de que han herido los sentimientos de otras personas, y es justo allí donde nuestra labor como adultos será ayudarles a comprender.
Recurre a palabras sencillas
Explícale con palabras sencillas lo que pasó y las consecuencias que tienen sus actos, pero no lo obligues a pedir perdón sin realmente querer hacerlo o comprender toda la situación.
En estos casos solo estaría obedeciendo sin pensar en lo que hizo y, por ende, no habrían cambios en el futuro referente a la conducta que ameritó el pedir perdón.
Fomenta su aprendizaje
Recuerda que la finalidad de pedir perdón no es generar frases vacías carentes de total sentido para el niño. Por el contrario, lo que se busca es su aprendizaje y el cambio de conductas inadecuadas o dañinas para que esto no vuelva a suceder.
A través del perdón realmente sentido, se producen cambios cognitivos que le permitirán tener más y mejores estrategias sociales.
Recuerda: eres su ejemplo
Finalmente, ten en cuenta que tu ejemplo será su principal guía para saber cómo comportarse en casos en los que sea necesario pedir perdón.
La importancia de fomentar las conductas positivas
Del mismo modo en el que debes obligar a un niño a pedir perdón, es también importante reconocerle cuándo lo ha hecho de manera honesta.
Demuéstrale lo orgulloso que estás de él o ella por haber hecho lo correcto en esa situación, y por haber tenido el valor para pedir perdón.
Relativiza los errores
Recuérdale además, que no pasa nada por haberse equivocado, y que ha actuado muy bien al darse cuenta de ello y pedir perdón.
Explícale que es normal sentirse un poco mal al haber cometido errores, pero que lo más importante es darnos cuenta de lo que hemos hecho y cambiar para que no vuelva a suceder.
La otra persona se siente tomada en cuenta
Recuérdale que cuando pedimos perdón, la otra persona se siente bien al sentirse tomada en cuenta y que si bien puede seguir un poco molesta durante un tiempo, el pedir perdón ha sido lo correcto y todo mejorará.
¿Qué hago si le cuesta pedir perdón a mi hijo?
Incluso para los adultos, darnos cuenta de nuestros errores y el impacto de nuestras acciones puede ser un poco difícil, y mucho más cuando de pedir perdón se trata.
Entonces es fácil comprender que para los niños esta situación puede ser un tanto compleja.
Hagámoslo juntos
Cuando al niño se le dificulta mucho pedir perdón, lo que podemos hacer es acompañarlo y pedir perdón juntos; de esta manera no se sentirá solo y expuesto y le dará un poco más de confianza poder hablar y pedir perdón de manera honesta.
Enseñar a través del ejemplo
De esta forma, además, ayudamos a que aprenda con nuestro ejemplo, al ver cómo los adultos cercanos gestionan las situaciones en las que son necesarias pedir perdón por algo que se haya hecho o dicho.
Expresándolo de formas diferentes
Otra manera en la que puedes ayudar al niño a pedir perdón es expresándolo de maneras diferentes.
Sobre todo con los más pequeños, sucede que se les complica decir con palabras lo que sienten. Entonces podemos enseñarles otras estrategias, como dar abrazos especiales para demostrar que se sienten mal.
Tarjetas con frases y dibujos
También puedes crear una serie de tarjetas o páginas con frases y dibujos de perdón para que el niño pueda utilizar y entregar a las personas cuando sienta que debe pedir perdón pero no sepa cómo hacerlo.
Acompañar y comprender
Y es que la clave para enseñar a los niños a pedir perdón es animarlos a hacerlo, ayudarlos a comprender el impacto de sus acciones y, más importante aún, el ejemplo que les mostramos día a día.
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