Todavía quedan unos días hasta que Netflix estrene ‘La maldición de Bly Manor’, segunda entrega de la terrorífica antología iniciada por ‘La maldición de Hill House’, el próximo 9 de octubre, pero en Espinof ya hemos tenido la oportunidad de charlar con varios de sus protagonistas (Victoria Pedretti, Henry Thomas, Oliver Jackson-Cohen, Amelia Eve y T’Ania Miller), quienes nos han dado algunas de las claves de lo que nos espera:
Las diferencias entre ‘La maldición de Hill House’ y ‘La maldición de Bly Manor’
Uno de los temas inevitables era saber en qué se diferencia ‘La maldición de Bly Manor’ de ‘La maldición de Hill House’, a lo que Jackson-Cohen destacó que «tenías que hacer algo completamente diferente, no podías hacer ‘La maldición de Hill House 2’ y reutilizar las mismas ideas o trucos» , mientras que Thomas y Pedretti señalaron lo siguiente
La principal diferencia entre ambas es que Mike Flanagan dirigió todos los episodios en ‘La maldición de Hill House’ y aquí no lo hace con todos. La serie se siente diferente, pero la idea es 100% suya. (Henry Thomas)
Se mantiene la esencia a la hora de contar la historia, de conocer a estos personajes, pero incorporando el elemento gótico habitual en la obra de Henry James. (Victoria Pedretti)
Algo más concretas fueron Amelia Eve y T’Ania Miller al aclarar cuál creían que era la principal diferencia:
Creo que ‘La maldición de Hill House’ apostaba por la manifestación de los traumas infantiles, algunos que vuelven de alguna forma y persisten, mientras que en ‘La maldición de Bly Manor’ da a los niños un rol diferente. Tienen mucho menos miedo de lo que asumiríamos que tendrían unos niños. Esa es una gran diferencia. Se muestran más abiertos a aceptar su existencia que los adultos… (Amelia Eve)
Sí, los adultos huyen de algo, mientras que los niños lo confrontan, lidian con lo que los adultos no. (T’Ania Miller)
Los personajes de Eve y Miller
Curiosamente, ellas son dos de las principales novedades del reparto de ‘La maldición de Bly Manor’ respecto a ‘La maldición de Hill House’ y esto fue lo que nos contaron sobre sus personajes:
Hannah pone todo su amor en criar a estos niños, se quiere asegurar de que todo el mundo sea feliz, pero tiene una forma particular de hacer las cosas, tanto es así que llega a olvidarse de sí misma (T’Ania Miller)
Cuando conoces a Jamie es muy sarcástica y contundente, no es una persona muy acogedora de entrada. Prefiere las plantas a las personas, creo que eso lo resume bien, pero al final eso no es verdad. El problema es que quiere mucho a la gente, así que acaba decepcionada (Amelia Eve)
La colaboración con Mike Flanagan
Además, Eve destacó la suerte que tuvo porque «Jamie era un personaje creado por Flanagan y no estaba basado necesariamente en un personaje de Henry James«, lo que le permitió trabajar más de cerca con él para construirlo, llegando a decir del director de ‘Doctor Sueño’ que «parece que su mente está cuatro pasos por delante de otros creadores«.
Por su parte, Thomas es el que más veces ha colaborado con Flanagan y recordó que cuando le dijo que quería que actuase en su siguiente trabajo pensó que se quedaría en nada, ya que eso pasa mucho en Hollywood, y apuntó lo siguiente sobre lo encantado que está de seguir trabajando con alguien que tiene tan claro lo que quiere:
Lo prefiero porque he trabajado con muchos directores que no estaban preparados.
Jackson-Cohen y Pedretti destacaron lo a gusto que se sintieron colaborando de nuevo con Flanagan, ya que ella considera que es «un gran comunicador«, mientras que él disfrutó porque «se confía en tu trabajo y se convierte más en una colaboración«.
Sufrir o hacer sufrir
Por último, hemos visto previamente a Pedretti sufriendo y haciendo sufrir tanto en ‘La maldición de Hill House’ como en ‘You’ y os adelanto que su personaje precisamente bien no va a pasarlo en ‘La maldición de Bly Manor’, por lo que quise saber cuál de las dos cosas disfruta más como actriz:
Probablemente sufrir. Creo que es la parte personal, como actriz quieres saber que estás sufriendo por todo lo que lo haces, porque hay algo interesante cuando haces cosas muy difíciles. Estuvo muy bien trabajar con Benjamin Ainsworth, hablar con él sobre diferentes escenas que teníamos que hacer juntos, donde él tenía que hacer cosas que él como niño, como ser humano, entiende que es inapropiado, violento o insensible. Fue muy interesante verle en plan “Sé que no debería hacer esto, no quiero hacerte sentir incómoda” y ser capaces de hablar sobre ello. Creo que cuando yo hago daño a otros estoy más asustada que podría hacer sentir mal a alguien. Es un reto de otra forma. Cuando estoy ahí sufriendo pienso que lo tengo bajo control… aunque quizá no sea el caso.