El violento influencer bielorruso que generó la invasión al campo en la final de la Champions League

La
final
de
la

Champions
League
de
este
sábado,
donde
el

Real
Madrid
se
impuso
por
2-0
ante
el

Borussia
Dortmund,

tuvo
la
invasión
de
tres
hombres
al
campo
de
juego
de
Wembley
apenas
inició
el
partido.
Una
situación
que
ya
se
ha
repetido
en
anteriores
ediciones,
aunque,
en
esta
ocasión,
además
de
detalles
como
la
tardanza
de
los
guardias
de
seguridad
para
expulsarlos
y
hasta
la
intervención
de
Marcel
Sabitzer
para
detener
a
uno
de
ellos,

hay
una
historia
polémica
y
violenta
detrás
de
los
tres
invasores.

Cuando
las
cámaras
de
los
fotógrafos
e
hinchas
registraron
la
invasión
de
los
tres
hombres,

se
pudo
observar
que
todos
llevaban
el
nombre
de
Mellstroy
en
sus
prendas.
También
el
de
Kick,
una
nueva
plataforma
de
streaming
que
llegó
para
hacerle
una
fuerte
competencia
a
Twitch.
Y
a
partir
de
ahí
se
pudo
conocer
el
trasfondo
de
los
invasores:

habían
sido
instados
por
un
influencer
a
invadir
la
cancha.

Pero,
¿quién
es
este
influencer?

Se
trata
de
Andrey
Burim,
apodado
Mellstroy,
un
streamer
de
25
años
nacido
en
Gómel,
Bielorrusia,
que
cuenta
con
más
de
tres
millones
de
seguidores
en
Instagram
(y
casi
medio
millón
en
Kick).

Fue
él
quien
instó
en
una
de
sus
últimas
transmisiones
a
sus
seguidores
a
invadir
la
cancha
en
la
final
de
la
Champions,
a
cambio
de
350.000
dólares
para
aquel
que
lo
consiguiera
primero.

Sin
embargo,
Mellstroy
lleva
consigo
unos
antecedentes
sumamente
polémicos.
Inició
su
carrera
como
streamer
allá
por
2015,
grabándose
mientras
jugaba
juegos
como
Minecraft
y
Counter
Strike,
entre
otros.
Pero,
a
partir
del
2017,
su
popularidad
creció
luego
de
que
su
contenido
mutara
del
gaming
a
mostrar
chats
con
mujeres
(entre
ellas,
varias
menores
de
edad)

a
las
que
persuadía
para
que
se
saquen
la
ropa
a
cambio
de
likes
y
seguidores
para
sus
redes
sociales.

Y
en
2020,
tuvo
su
clip
más
viral
y
desagradable.
Una
noche,
Mellstroy
se
encontraba
en
stream
junto
a
sus
amigos
y
varias
mujeres.
En
un
momento
y
ante
la
mirada
de
sus
seguidores
y
hasta
del
resto
de
personas
que
se
encontraba
allí,

sujetó
del
cuello
a
una
joven
modelo
de
21
años
llamada
Alena
Efremova
y
le
golpeó
la
cabeza
varias
veces
contra
una
mesa,
para
después
ponerla
de
pie
y
empujarla
fuertemente.
Absolutamente
nadie
intervino.

Efremova
lo
denunció
y
le
exigió
una
indemnización
por
más
de
130.000
dólares.
¿Cómo
respondió
Mellstroy?
Sólo
con
una
burla.
«Es
una
cantidad
de
dinero
humillantemente
baja;
si
me
pidiera
30
o
40
millones
pagaría»,
dijo
el
bielorruso.
¿La
condena
contra
él
por
tal
hecho?
Seis
meses
de
trabajo
correctivo
y
una
absurda
multa
de
1.000
dólares.
Youtube
y
Twitch,
por
sus
partes,
decidieron
banearlo,
aunque
en
Kick,
hasta
el
momento,

transmite
sin
problemas.
Un
peligro…