A estas alturas del curso escolar, en los grupos de Whatsapp de madres y padres ya se habrían recibido unos cuantos mensajes alertando de la temida pediculosis.
Sin embargo, este curso ha sido también diferente en este punto y parece que a los piojos no se les espera, al menos no de manera masiva. Pero no ha sido la ciencia ni unos nuevos productos anti pediculosis los que han terminado con ellos. La responsable es la distancia social impuesta por las normas anti-Covid.
Pero los piojos han encontrado unos huéspedes aceptables: los adolescentes, dejando claro que a estas edades no se cumple el distanciamiento.
La venta de los tratamientos anti pediculosis ha caído un 40% este curso
Con menos niños por clase, y menos contacto físico, estos parásitos tienen poca oportunidad de propagarse. Y eso tiene un efecto colateral. Guillermo Durán, responsable de negocio de farmacia de la consultora IQVIA, explica que la demanda de champús, lociones y tratamientos para los piojos ha bajado mucho:
«Con la reducción de los contactos tenemos un descenso importante de la venta de productos antipiojos. En lo que va de año ha vendido 1,7 millones de unidades en la farmacia, lo que equivale a 17,4 millones de euros, pero sobre todo, que ha vendido un 40% menos de lo que lo había hecho a estas alturas en 2019».
Este descenso de la venta de productos para tratar los piojos que señalan las farmacias es una prueba de la eficacia de la distancia social.
Sin embargo, estos molestos parásitos han encontrado unas cabezas donde posarse, las de los adolescentes, indicador de que el distanciamiento social no se está cumpliendo porque los piojos ni saltan ni vuelan.
Y si hacen acto de presencia…
A pesar de su descenso, estos odiosos bichitos siguen acechando para infectar la cabeza de nuestros hijos, así que te damos algunas nociones básicas para manteneros a distancia y evitar la pediculosis, nombre por el que se conoce a la infestación del cuero cabelludo y pelo humano por el piojo de la cabeza.
Según explica la Asociación Española de Pediatría (AEP) en su informe “Pediculosis de la cabeza”, es tan contagiosa como el resfriado, y puede sufrirlos cualquier niño, con independencia de sus antecedentes, de su higiene personal o la longitud de su pelo, siempre y cuando exista un contacto directo con otro pequeño afectado por los piojos.
Para eliminarlos, una vez que hacen aparición, es necesario aplicar champú, loción o espuma pediculicida sobre el pelo seco, masajeando la zona ligeramente. Así lo recomienda la AEP, que señala que después hay que dejarlo en el pelo durante 10 minutos y luego aclarar con agua templada.
Este año, también hay menos gripe
Pero la escasa invasión de los piojos no es el único efecto saludable del confinamiento y las medidas restrictivas a las que obliga la pandemia: también hay menos gripe y una de las razones parece estar en el uso generalizado de mascarillas.
Según explica el consultor farmacéutico Guillermo Durán, la venta de antigripales en farmacia también han descendido, porque que el coronavirus y la gripe se transmiten de la misma forma por lo que las medidas previenen ambos virus:
«En lo que llevamos de año se ha vendido un 20% menos de unidades respecto a lo que se había vendido en 2019 y un 16% de su facturación en euros».
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