Disney ha tardado un tiempo, pero finalmente ha decidido recuperar ‘Star Wars’ en los cines. Después de unos meses en los que se habló de una película de Patty Jenkins y la llegada de Kevin Feige a la saga –posteriormente canceladas-, Disney ha aprovechado la Star Wars Celebration de 2023 para anunciar tres películas que no conforman una trilogía (por primera vez en la historia de la franquicia), y que suponen también el regreso de Daisy Ridley, protagonista de la última y discutida saga de ‘Star Wars‘.
Las tres películas estarán ambientadas en épocas distintas y ya tienen directores asignados: James Mangold (‘Logan‘, ‘Indiana Jones y el Dial del Destino‘), Dave Filoni (‘The Mandalorian‘) y Sharmeen Obaid-Chinoy (‘Ms. Marvel’). De hecho, abarcarán la cronología prácticamente completa de la franquicia, ya que una de estas películas, la dirigida por Mangold, transcurre durante el Amanecer de los Jedi, es decir, 25000 años antes de la primera trilogía. El director la ha definido como una película «de épica bíblica».
Obaid-Chinoy será la que recupere a Rey Skywalker, interpretada de nuevo por Daisy Ridley, como reconstructora de la Orden Jedi, en lo que supone una especie de coda de la trilogía protagonizada por la protagonista más reciente de la saga. Finalmente, Filoni se adentrará en una época que conoce de sobra: aquella en la que se ambienta ‘The Mandalorian‘, y retratando el choque entre la Nueva República y el Remanente Imperial.
Es una decisión, sobre el papel, acertada: hay una creencia generalizada de que ‘Star Wars’ ha dado demasiados palos de ciego últimamente con las nuevas pelíuculas, y anunciar tres no vinculadas entre sí, después de éxitos en formato serie como ‘The Mandalorian’ y ‘Andor‘, parece un giro apropiadamente conservador. Lucasfilm quiere convertir a ‘Star Wars’ de nuevo en la reina de la ciencia ficción para todos los públicos, y aunque no terminó de conseguirlo con la trilogía de Abrams, ahora tiene el buen precedente de las series para saber qué caminos seguir.