La
Policía
Nacional
ha
detenido
a
un
hombre
de
33
años,
gestor
de
un
apartamento
turístico
en
la
ciudad
de
Salamanca,
por
un
presunto
delito
contra
la
intimidad
de
las
personas:
el
detenido
ha
sido
acusado
de
instalar
una
cámara
oculta
en
un
reloj
despertador
digital
dentro
del
apartamento,
con
la
que
presuntamente
espiaba
a
los
inquilinos.
El
incidente
salió
a
la
luz
el
pasado
12
de
agosto,
cuando
una
pareja
que
se
hospedaba
en
el
apartamento
notó
algo
extraño
en
un
reloj
despertador
ubicado
sobre
la
mesita
de
la
televisión
en
el
salón.
Al
inspeccionar
el
aparato,
los
inquilinos
sospecharon
que
este
contenía
una
cámara
oculta
y,
preocupados
por
su
privacidad,
decidieron
contactar
con
la
Policía
Nacional.
Cuando
los
agentes
acudieron
al
lugar
y
revisaron
el
reloj
despertador,
confirmaron
las
sospechas
de
la
pareja:
en
la
parte
frontal
del
dispositivo
encontraron
una
microcámara
oculta
y,
en
la
parte
posterior,
una
ranura
con
una
tarjeta
de
memoria
MSD.
Además,
el
reloj
tenía
capacidades
avanzadas,
como
conexión
wifi
inalámbrica,
detección
nocturna
y
de
movimientos,
lo
que
permitía
monitorizar
de
forma
remota
las
estancias
del
apartamento.
Tras
este
hallazgo,
los
agentes
intervinieron
el
dispositivo
para
realizar
un
análisis
más
detallado.
El
estudio
confirmó
que
el
reloj
estaba
equipado
para
grabar
vídeo
de
alta
calidad,
tanto
de
día
como
de
noche,
y
enviar
estas
imágenes
en
tiempo
real
a
través
de
Internet.
mejorar
la
SEGURIDAD
EN
INTERNET:
VPN,
DNS
y
páginas
con
HTTPS
La
investigación
prosigue
Ante
la
gravedad
de
los
hechos,
la
Policía
Nacional
procedió
a
la
detención
del
gestor
del
apartamento,
quien
ya
ha
sido
puesto
en
manos
del
Juzgado
de
Instrucción
de
Guardia
de
Salamanca,
que
determinará
las
responsabilidades
penales
correspondientes.
Las
autoridades
continúan
investigando
para
determinar
si
este
caso
es
un
hecho
aislado
o
si
el
detenido
podría
haber
utilizado
la
misma
táctica
en
otras
propiedades
bajo
su
gestión.
Mientras
tanto,
el
sector
turístico
se
enfrenta
a
un
escrutinio
creciente
sobre
las
medidas
de
seguridad
y
privacidad
que
deben
garantizar
a
sus
clientes.
La
Policía
Nacional
ha
recordado
a
la
ciudadanía
la
importancia
de
denunciar
cualquier
situación
sospechosa
en
alojamientos
turísticos
y
ha
reforzado
su
compromiso
en
la
protección
de
la
intimidad
de
las
personas.
Imagen
|
Policía
Nacional
En
Genbeta
|
Una
anfitriona
de
Airbnb
recibió
una
factura
de
1.500
euros
de
luz.
Acusó
a
sus
inquilinos
de
minar
criptomonedas