Las
estafas
telefónicas
son
cada
vez
más
habituales
y
el
objetivo
suele
ser
hacerse
con
nuestros
datos
bancarios
o
conseguir
que
realicemos
algún
pago.
A
día
de
hoy
somos
muy
conscientes
de
los
riesgos
que
conlleva
hacer
clic
en
enlaces
sospechosos,
pero
es
fácil
bajar
la
guardia
cuando
intentan
estafarnos
por
teléfono.
Algunas
de
las
estafas
telefónicas
más
habituales
son
el
timo
de
la
llamada
perdida
o
el
de
la
doble
llamada.
Además,
el
spoofing
telefónico
permite
que
los
delincuentes
se
hagan
pasar
por
entidades
bancarias
suplantando
el
número
de
teléfono.
Otra
de
las
estafas
telefónicas
que
conviene
tener
en
cuenta
es
el
fraude
del
sí.
A
continuación
te
explicamos
en
qué
consiste.
Cómo
funciona
el
fraude
del
sí
La
Policía
Nacional
alertaba
a
finales
del
año
pasado
acerca
de
los
riesgos
de
la
estafa
del
sí,
una
técnica
empleada
por
los
estafadores
que
puede
tener
graves
consecuencias.
Los
estafadores
se
aprovechan
de
algo
tan
habitual
como
decir «sí»
cuando
respondemos
a
una
llamada
de
teléfono
para
grabar
nuestra
voz
y
así
poder
utilizarla
para
intentar
darnos
de
alta
en
diferentes
servicios
o
autorizar
transacciones
bancarias.
Ya
hay
casos
de
afectados
por
este
fraude.
De
hecho,
el
INCIBE
se
hacía
eco
hace
unos
meses
del
caso
de
una
afectada
por
esta
estafa.
Tras
recibir
una
llamada
y
contestar
diciendo «¿sí?»
empezó
a
escuchar
una
locución
que
indicaba
que
acababa
de
suscribirse
a
un
supuesto
servicio
premium
de
Amazon.
Unos
segundos
después,
la
llamada
se
cortó
automáticamente.
Tal
y
como
explican
desde
el
Instituto
Nacional
de
Ciberseguridad,
no
significa
que
lo
que
dice
la
locución
sea
real:
es
posible
que
los
estafadores
no
tengan
forma
de
cobrarnos
por
el
supuesto
servicio
premium
que
menciona
la
locución.
En
realidad,
lo
que
buscan
es
generar
preocupación
para
tener
más
posibilidades
de
hacerse
con
nuestros
datos
bancarios
cuando
vuelvan
a
ponerse
en
contacto
para
anular
esta
supuesta
suscripción.
Aun
así,
el
INCIBE
ya
ha
comentado
con
anterioridad
que
los
estafadores
pueden
hacer
uso
de
esta
técnica
para
grabar
nuestra
voz
e
intentar
autorizar
transacciones
financieras,
firmar
contratos
e
incluso
falsificar
nuestra
identidad.
El
modus
operandi
puede
variar.
A
veces,
al
responder
la
llamada
y
contestar
con
un «¿sí?»
no
escucharemos
a
nadie
al
otro
lado
y
la
llamada
se
cortará.
En
caso
de
tratarse
de
una
estafa,
los
delincuentes
habrán
grabado
nuestra
voz
e
intentarán
usarla
para
los
fines
que
ya
hemos
mencionado.
En
otros
casos
se
establece
la
comunicación
y
los
estafadores
se
hacen
pasar
por
una
empresa.
En
ese
caso,
intentarán
que
respondamos
afirmativamente
para
darnos
de
alta
en
servicios
o
firmar
contratos,
por
poner
algunos
ejemplos.
Llegados
a
este
punto
es
importante
tener
en
cuenta
que
no
siempre
que
contestemos
una
llamada
y
nadie
responda
nos
encontramos
ante
una
estafa:
puede
que
se
trate
de
una
robollamada
y
simplemente
estén
intentando
verificar
que
el
número
es
válido.
Qué
hacer
en
caso
de
recibir
una
llamada
sospechosa
La
recomendación
más
habitual
en
caso
de
recibir
una
llamada
sospechosa
es
cortar
la
comunicación
y
bloquear
el
número
para
evitar
que
puedan
volver
a
ponerse
en
contacto
con
nosotros.
En
caso
de
tener
alguna
sospecha
de
que
hayan
podido
realizar
algún
cargo,
conviene
revisar
las
cuentas
bancarias
para
detectar
cualquier
tipo
de
movimiento
extraño.
Por
supuesto,
siempre
es
importante
recordar
que
en
ningún
momento
debemos
facilitar
datos
personales
durante
una
llamada
si
no
tenemos
claro
con
quién
estamos
hablando
realmente.
En
caso
de
estar
hablando
con
estafadores,
podrían
tratar
de
recopilar
la
máxima
cantidad
de
información
posible
sobre
nosotros
para
estafarnos.
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las
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que
pueden
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