Hace
unos
meses,
Víctor,
un
usuario
español
de
AliExpress,
relataba
en
Forocoches
su
experiencia
con
una
compra
online
aparentemente
inocente…
de
una
navaja
automática,
que
tras
ser
adquirida
por
menos
de
20
euros,
terminó
traduciéndose
en
una
multa
de
800
euros
por
parte
de
la
Guardia
Civil.
En
los
últimos
años,
plataformas
de
e-commerce
con
sede
en
China,
como
AliExpress,
Temu
y
Shein
han
experimentado
un
auge
sin
precedentes,
a
pesar
de
la
necesidad
de
gestionar
envíos
internacionales.
Triunfan,
también
en
España,
por
sus
precios
competitivos…
pero
la
compra
puede
convertirse
en
una
pesadilla
si
no
se
tienen
en
cuenta
las
normativas
locales
a
la
hora
de
adquirir
productos.
Un
claro
ejemplo
de
ello
son
los
problemas
derivados
de
la
compra
de
productos
prohibidos,
como
las
navajas
automáticas,
que
ya
han
sido
causa
de
la
imposición
de
multas
significativas
en
España.
Según
contaba
el
propio
Víctor,
realizó
el
pedido
en
2022,
esperando
añadir
una
nueva
pieza
a
su
colección
de
armas,
la
cual
ya
incluía
objetos
como
un
fusil
de
airsoft
y
un
cuchillo
nepalí.
Sin
embargo,
la
navaja
nunca
llegó
a
su
domicilio.
Lo
que
sí
le
llegó
(ya
un
año
después)
fue
una
carta
certificada
con
la
sanción.
El
problema
radica
en
que
las
navajas
automáticas
están
catalogadas
como «armas
prohibidas»
en
España
desde
el
Real
Decreto
137/1993.
Dicho
decreto
prohíbe
expresamente
la
fabricación,
comercio,
almacenamiento
y
tenencia
de
este
tipo
de
armas
sin
la
correspondiente
autorización.
Además,
esta
normativa
fue
reforzada
por
la
Ley
de
Seguridad
Ciudadana
de
2015,
que
extiende
la
prohibición
también
a
navajas
no
automáticas
si
tienen
una
hoja
superior
a
11
centímetros.
La
navaja
de
Víctor,
con
una
hoja
de
ocho
centímetros,
fue
interceptada
por
el
servicio
de
vigilancia
aduanera,
lo
que
desencadenó
la
sanción.
«Multa
pagada
y
justificante
mandado
a
la
Guardia
Civil.
Me
ha
salido
caro
pero
lección
aprendida».
Multas:
¿qué
riesgo
corren
los
consumidores?
El
caso
de
Víctor
no
es
un
hecho
aislado:
otro
usuario
del
mismo
foro
relató
su
sorpresa
cuando,
al
año
y
medio
de
haber
pedido
una
navaja
stiletto
clásica
que
nunca
recibió,
se
encontró
con
una
multa
de
400
euros.
En
este
caso,
la
multa
la
desencadenó
un
objeto
que
costaba
alrededor
de
10
euros.
El
precio
de
la
navaja,
por
supuesto,
era
irrelevante
ante
la
ilegalidad
de
su
adquisición.
Este
tipo
de
sanciones
no
son
excepcionales.
De
hecho,
las
multas
pueden
variar
dependiendo
de
la
gravedad
de
la
infracción,
oscilando
entre
los
300
euros
y
los
30.000
euros,
según
el
tipo
de
arma
y
las
circunstancias.
En
muchos
casos,
los
compradores
no
se
percatan
de
que
lo
que
adquieren,
a
pesar
de
ser
comercializado
de
forma
accesible
en
Internet
(al
fin
y
al
cabo,
AliExpress
no
realiza
ninguna
ilegalidad
al
enviar
ese
producto
desde
China),
está
sujeto
a
regulaciones
específicas
en
España.
¿Quién
es
responsable:
el
comprador
o
la
plataforma?
En
situaciones
como
esta,
los
consumidores
pueden
sentir
frustración
y
preguntarse
si
la
plataforma
de
comercio
electrónico
debería
asumir
parte
de
la
responsabilidad.
Sin
embargo,
empresas
como
AliExpress
se
lavan
las
manos
ante
este
tipo
de
situaciones:
según
las
políticas
de
la
plataforma,
su
modelo
de
negocio
se
basa
en
ofrecer
productos
a
nivel
mundial,
pero
no
se
responsabilizan
de
la
legalidad
de
los
artículos
en
cada
país.
Este
vacío
deja
al
consumidor
con
la
responsabilidad
de
asegurarse
de
que
lo
que
compra
cumple
con
las
leyes
del
lugar
donde
reside,
especialmente
cuando
se
trata
de
artículos
que
podrían
estar
sujetos
a
regulaciones,
como
armas
o
dispositivos
electrónicos.
¿Cómo
evitar
problemas
con
las
compras
online?
Para
evitar
situaciones
como
las
descritas,
es
fundamental
que
los
consumidores
sean
conscientes
de
las
normativas
locales
antes
de
hacer
cualquier
pedido
en
plataformas
de
comercio
electrónico.
-
Evitar
productos
delicados:
Incluso
si
el
producto
parece
inofensivo,
si
pertenece
a
una
categoría
delicada
como
armas,
cuchillos
o
ciertos
dispositivos,
es
mejor
reconsiderar
la
compra. -
Leer
las
condiciones
del
proveedor:
Muchas
veces,
los
vendedores
internacionales
no
incluyen
advertencias
claras
sobre
la
legalidad
de
sus
productos
en
determinados
países.
Por
lo
tanto,
es
recomendable
investigar
el
producto
antes
de
añadirlo
al
carrito. -
Mantener
registros
de
las
compras:
Si
surge
algún
problema,
contar
con
pruebas
de
la
compra
y
del
contexto
puede
ser
útil,
tanto
en
las
reclamaciones
ante
la
plataforma
como
ante
las
autoridades.
Imagen
|
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Merino
mediante
IA
En
Genbeta
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Hacer
devoluciones
en
Amazon
va
a
tener
consecuencias:
estos
son
sus
cambios
de
políticas
para
2025