Sobre un bol rallamos la patata y la zanahoria. Luego cortamos la cebolleta en medios aros y la berenjena en cubos de un centímetro. Salamos todo, incorporamos el garam masala y mezclamos bien todos los ingredientes. Añadimos la harina de garbanzo mezclando bien con las manos para que se quede bien adherida a todos los trozos de verduras, aproximadamente 150 gramos de harina.
Agregamos poco a poco el agua fría incorporando con las manos hasta conseguir una masa semilíquida que puedas coger con la mano pero gotee y ponemos una sartén a calentar con el aceite de girasol.
Freímos en el aceite a 180 ºC las bolas que vamos cogiendo con los cuatro dedos y soltando con el pulgar sobre el aceite, no deben ser bolas uniformes, sino que veamos la forma de las distintas verduras.
Escurrimos en una rejilla o sobre papel absorbente y comemos bien calientes, acompañada de un yogur con una gotas de lima y hierbabuena picada o un chutney de mango.